Análisis Monster Hunter 3 Tri

Pero los buenos gráficos no terminan en cinemáticas, no. Todo el juego es una maravilla a nivel técnico, desde las texturas de la piel de los diferentes monstruos hasta el brillo del metal en las armas.

A lo largo del juego, y cuando se nos presente por primera vez uno de los llamados "Monstruos grandes", veremos un pequeño video sobre la forma de actuar del animal. Estos videos son generados por el motor del juego, siendo una demostración técnica de lo que puede dar de sí la blanca de Nintendo. Un ejemplo de esto sería el video que tenéis a continuación sobre un monstruo "normalito", los Ludroth:

Durante el juego podremos cambiar de ropa y arma a nuestro personaje, lo cual se verá reflejado en su apariencia todo el tiempo. Además, en su comienzo podremos customizar a nuestro personaje con diferentes peinados, caras, etc. Es un editor sencillo, aunque tampoco el juego requiere que sea más complejo, ya que si el personaje lleva un yelmo encima no se le verá la cara ni el pelo.

Los escenarios del juego parecen un tanto vacios al comienzo nuestra aventura, pero una vez que vayamos avanzando, agradeceremos ese espacio para luchar contra los monstruos más grandes. Además, los elementos de los escenarios como los ríos, los árboles, las rocas o los esqueletos, gozan de un nivel de detalle bastante alto, pudiendo interactuar con ellos.

La aldea de Moga, lugar entorno al que gira el modo Offline del juego, está llena de vida. Los molinos moviéndose, el vaivén de las olas, los barcos que pasan... todo se mueve con una suavidad extrema.

El diseño artístico del juego en general es una maravilla. Los monstruos gozan de un nivel de detalle increíble, con elementos de su cuerpo adecuados a su hábitat y en perfecta armonía con el ecosistema. Y es que en Monster Hunter Tri no hay fases ni pantallas, sino ecosistemas. Un total de 5 para ser exactos, cada uno con sus monstruos, su clima y su diferente vegetación.

El modo Online no hace ascos a este apartado. A pesar de compartir pantalla con hasta cuatro amigos, los escenarios que podemos ver en este modo están al mismo nivel técnico que en el modo Offline. La ciudad principal del modo Online se llama Loc-Lac, ubicada en el desierto y con un diseño si no igual, superior a Moga.

Nada más en este apartado, salvo destacar algunos efectos gráficos impresionantes; los reflejos acuáticos en la Isla Desierta, la lava descendiendo del volcán y las rocas cayendo al mar, las fases subacuáticas, el encuentro Online con Jhen Mohran y los grandes escenarios abiertos como la Isla Desierta.

En conclusión, aquí tenemos el juego más puntero gráficamente de Wii, y los próximos tendrán que trabajar mucho para igualar este poderío.

Sonido

El punto más flojo del juego, que sin ser malo, tampoco sobresale como podría hacerlo en un juego como este.

La banda sonora del juego es notable. La reconoceremos en cuanto la oigamos, pero no se nos quedará grabada durante mucho tiempo:

Cada vez que vemos el río al entrar a Isla Desierta desde la aldea Moga, sonará una pequeña pieza de música que, a pesar de quedar muy emocionante la primera vez, las siguientes suena realmente repetitiva. La música se detiene y no vuelve, hasta el encuentro con algún gran monstruo, en el que se vuelve tensa y agresiva.

Los efectos sonoros, tales como los charcos o los golpes de las armas contra elementos muy duros, suenan muy bien, sin desentonar con el juego y metiéndonos más en la aventura. Aquí, el altavoz del mando de Wii podría haber tenido algún uso.