Análisis Uncharted: El Legado Perdido

Uncharted El Legado Perdido: un interludio magistral

Apenas un año después del lanzamiento de ‘Uncharted 4: El desenlace del ladrón’, la franquicia continúa con una nueva propuesta planteada inicialmente como DLC y que ha terminado transformándose en algo más. ‘Uncharted: El Legado Perdido’ se perfila como un juego independiente, ahondando tras los sucesos de la cuarta entrega y ofreciendo nuevos detalles sobre dos de sus personajes femeninos: Chloe Frazer y Nadine Ross. Tras completar su campaña, os contamos todos los entresijos tras la nueva propuesta de Naughty Dog. ¿Habrá conseguido estar a la altura?

Tras una cuarta entrega sobresaliente, la franquicia Uncharted sigue expandiéndose con ‘Uncharted: El Legado Perdido’, título que nos sitúa tras los acontecimientos de ‘Uncharted 4’ y que pone bajo el control del jugador a Chloe Frazer (cuya primera aparición fue en ‘Uncharted 2: El reino de los ladrones’) en compañía de Nadine Ross (antagonista secundaria de la cuarta entrega). Con la intención de evitar destripar acontecimientos pasados, centrémonos exclusivamente en lo que este ‘Uncharted: El Legado Perdido’ ofrece.

En esta ocasión viajaremos a la India, lugar en el que Chloe Frazer tiene en mente hacerse con un preciado tesoro para lo cual contará con la inestimable ayuda de una poderosa aliada: Nadine Ross. Este dúo de protagonistas femeninas mantendrá toda la esencia de anteriores entregas, protagonizando tanto momentos de acción, como de dudas sobre las verdaderas intenciones de cada una así como un gran repertorio de comentarios ingeniosos y repletos de humor. Con un apartado gráfico que vuelve a lucir a un altísimo nivel, la propuesta jugable en ‘Uncharted: El Legado Perdido’ arranca en un humilde mercado en la India. Allí comenzará nuestra aventura con Chloe Frazer, ofreciendo los momentos más pausados de esta original entrega, para posteriormente dar paso a una gran variedad de situaciones que sin embargo no resultarán del todo nuevas para todos aquellos jugadores que vengan de ‘Uncharted 4: El desenlace del ladrón’.

Uncharted no pierde su identidad

Y es que los momentos de conducción, el uso del gancho y el pico de escalada seguirán muy presentes en esta nueva entrega. Como novedades, a parte de la pareja protagonista, encontramos una historia interesante, con una zona de guerra en la que realmente se palpa la tensión y a través de la cual ahondaremos en el pasado tanto de Chloe Frazer como de Nadine Ross; permitiendo seguir uniendo las piezas del puzle, para deleite de sus fans, sobre el trasfondo de ambas mujeres. De nuevo encontramos un sistema de juego dividido en capítulos, marca de la casa, con alguno de ellos especialmente largos con la posibilidad de completar puzles no obligatorios. Es en este punto donde ‘Uncharted: El Legado Perdido’ ofrece un extenso mapeado a recorrer con nuestro 4x4, y donde la duración puede verse más o menos incrementada según las preferencias de cada jugador.

En nuestro caso, cumplir con la mayoría de los puzles así como recolectar más de la mitad de los tesoros ocultos nos ha tomado 8 horas, cifra que como decimos puede variar ligeramente si somos de explorar cada recoveco de los escenarios en busca de sacar trofeos. A todo ello hay que sumar las horas que pasaremos pegados en sus otros dos modos de juego: el Multijugador y el Modo Supervivencia a los que se suman nuevas skins para Chloe y Nadine así como un nuevo personaje que responde al nombre de Asav. En este punto hay que dejar claro que la comunidad multijugador de ‘Uncharted: El Legado Perdido’ se encontrará unificada a la de ‘Uncharted 4: El desenlace del ladrón’, favoreciendo de esta manera que disfrutemos al máximo con cualquiera de las dos entregas a partir del próximo 23 de agosto.

Volviendo a la campaña para un jugador, en ciertos momentos nos ha parecido que la dificultad de esta última entrega puede resultar sensiblemente superior a lo visto en anteriores, ya no en el apartado de la acción, peleas y tiroteos (para lo cual contamos con la ingente cantidad de niveles de dificultad como Explorador, Ligero, Moderado, Difícil y Aplastante) si no en la resolución de algunos puzles; teniendo que probar en algunos de ellos varios intentos hasta que el ensayo y error ha querido ponerse de nuestra parte. En cualquier caso, la dificultad no llega a desesperar pero sí que puede alargar la vida útil del juego o incluso incitar a los jugadores más impacientes a mirar la solución en Internet.

Cuando el continuismo no es malo

Se sabe que las comparaciones son odiosas, pero si lo hacemos con ‘Uncharted: El Legado Perdido’ y la cuarta entrega numerada hay que decir que, para bien o para mal, es muy continuista. Este aspecto suele ser más bien negativo en la mayoría de los casos, pudiendo caer en la monotonía y la ausencia de ideas nuevas. Sin embargo, el título salva la papeleta gracias una vez más al ritmo frenético y el espectáculo audiovisual, por no hablar de un argumento interesante (quizás no tanto como en Uncharted 4) que nos mantendrá en vilo desde el giro en los acontecimientos a mitad de juego hasta su conclusión.

Tras completar la campaña nos quedamos con buen sabor de boca y podemos afirmar rotundamente que el juego está a la altura de las circunstancias. Sobre todo nos ha gustado su arranque, más pausado y con momentos de exploración, dejando la sensación de que quizás hubiera sido un acierto prolongar esas mecánicas durante algún capítulo más dentro de este ‘Uncharted: El Legado Perdido’. A su vez, el frenetismo de su última hora es todo un acierto, manteniendo al jugador en vilo y pegado al mando en busca de las claves sobre el futuro de la franquicia de Naughty Dog. Los puntos más flojos los encontramos entre medias, pudiendo pecar de poco original en la propuesta jugable sobre todo si ya conocemos las bondades de ‘Uncharted 4’.

Una nueva genialidad

Aun con todo, y sabiendo ver sus escasas debilidades, hay que admitir que estamos ante una nueva genialidad de Naughty Dog. ‘Uncharted: El Legado Perdido’ es un título que se disfruta de manera independiente incluso si es la primera vez que nos acercamos a la saga. La endiablada jugabilidad, unida a un apartado audiovisual que quita el hipo, asegura que el desembolso esté más que justificado a poco que nos gusten los juegos de aventuras y las historias con gancho, nunca mejor dicho. A falta de conocer próximos movimientos sobre el futuro de la franquicia y sus posibles nuevos protagonistas (aquí se puede abrir un debate interesante), nuevamente hay que admitir que los videojuegos son arte. Y en este caso nos encontramos ante una nueva obra maestra tan solo ensombrecida por el trabajo realizado en ‘Uncharted 4’.

      - Las cobras siempre han sido mi serpiente favorita.

      - Yo creo que no tengo serpiente favorita.

           Nadine y Chloe, en busca del legado perdido.