Análisis Ready or Not

Análisis de Ready or Not - Cuando no todo son tiros, sino estrategia y paciencia

Los videojuegos tienen una increíble facultad y es procurar que todos los jugadores puedan encontrar esa obra ideal para ellos. No importa si buscan una experiencia más tranquila o algo más activo en una aventura, todos encuentran ese título que transforma el estilo de juego a algo novedoso. Y si bien puede parecer que ya no hay más en lo que reinventar, llegan juegos como Ready or Not para callar bocas, para demostrar que, incluso en los shooter, todavía hay mucho que explorar.

Sin embargo, la sorpresa que viene con este ambicioso proyecto no es precisamente su fantasía, sino realmente el realismo que muestra. Y es que opta por mostrar el lado más crudo de los shooters, ese en el que no se puede uno limitar a disparar por disparar, sino que hay que poner la cabeza y elegir muy bien la estrategia antes de ponerse en marcha. Es aquí donde entra la cuestión de, ¿hasta qué punto puede ser un reto el juego? Os lo contamos todo.

Poniendo a prueba la habilidad del jugador en solitario

Uno de los puntos más llamativos de Ready or Not es que llevaba bastante tiempo en early access y, con ello, mucho tiempo de trabajo detrás. No solo eso, sino la escucha constante de los desarrolladores a esos jugadores que le dieron la oportunidad para ir mejorando conceptos, propuestas y, sobre todo, elementos que hagan que el juego sea esa prueba a los jugadores que tanto tiempo se ha esperado.

Ready or Not

En esta versión final, los desarrolladores no solo han elaborado una buena cantidad de contenido, sino que este invita a rejugarlo, a poner a prueba nuestra habilidad y, sobre todo, poner a prueba nuevas tácticas. Porque lo primero que nos demostrará el juego es que, cuando sientes que ya eres un as de los shooters, todavía hay mucho espacio de mejora.

No se trata de un juego en el que puedas entrar a disparar en una habitación sin pensar porque el cargador parece infinito. Realmente te pondrás en la piel de un SWAT que debe evaluar la situación y saber cómo actuar. Hacerlo a lo loco no traerá más que problemas y terribles consecuencias. Después de todo, el juego ha sido diseñado con especial cuidado para resultar violento y cruel, aportando ese realismo al shooter que lo hace tan diferente.

Sin embargo, esta experiencia para un jugador no solo es colarnos en un complejo donde las drogas se mueven por el lugar, sino también cuenta con distintos modos donde las sorpresas no dejan de llegar. Y es que incluso tendremos que ser capaces de gestionar las emociones y salud de nuestros compañeros, corriendo con todos los riesgos en caso de que estos mueran.

No solo es un shooter, es algo más

Ready or Not ha llegado para demostrar que no solo se trata de un shooter en el que afinar puntería o tener cuidado a la hora de elegir nuestros escondites. Se trata de un juego en el que se respira la tensión, la complejidad y, por supuesto, requiere de gestión por nuestra parte para mantener el equipo unido así como lograr que la misión sea un completo éxito.

Ready or Not

Sin embargo, sin entrar en muchos detalles para que seáis vosotros quienes descubráis el verdadero potencial de este juego, vamos a hablar de sus posibilidades a nivel jugable. De como podemos ser despiadados y superar las misiones y objetivos a base de tiros, u optar por ser un poco más piadosos y tratar de esposar a los enemigos. Un trabajo que requerirá de estrategia y paciencia.

Y es que, ante todo, este juego es un constante reflejo de que no vale cegarse y tratar de entrar en la acción sin pensar. Debemos posicionar muy bien a nuestro equipo, permitir que estos nos sigan o gestionar sus movimientos… Ser, ante todo, ese equipo especializado de SWAT que se espera que actúe.

Una IA que no perdona a los jugadores

Uno de los aspectos que más llaman la atención de los jugadores es, precisamente, lo espabilada que resulta la IA, hasta un punto en el que llega a resultar angustioso jugar y no en un mal sentido, sino por lo realista que resulta. Si bien podemos dar con personajes enemigos que fallen los tiros y no sean mortales nada más nos vean, otros mostrarán ese lado más experimentado en el que solo aquellos que pongan un poco de estrategia en el juego podrán superar.

La IA puede resultar completamente impredecible, con personajes corriendo en busca de salvarse o que incluso le apuntes con un arma y se rinda. Sin embargo, también habrá ocasiones en las que busque pelear, a pesar de que pueda costarle la vida. Incluso, si te mantienes atento, podrás comprobar cómo se esconden o fingen que han muerto para tender una trampa.

Ready or Not

Aquí es donde el juego nos demuestra que no es apto para todo el mundo. Muchos jugadores la alaban como otros se sienten frustrados. Y es que Ready or Not no busca adaptarse al gusto de todos, sino demostrarnos que, aquellos que buscaban un juego realista, lo han conseguido. Eso sí, que estén preparados para las consecuencias.

Pasando al multijugador donde cooperar es clave

Si bien el modo en solitario os lo hemos presentado a cuentagotas porque la verdadera magia se descubre cuando uno lo juega de verdad, llega el momento del multijugador, el campo estrella para muchos jugadores. Sin embargo, lo que debes saber es que cambia por completo el concepto del juego ya que, tu escuadrón en esta ocasión, no contará con una IA.

En el modo para un jugador tenemos a una IA que controlar, en el modo multijugador dependemos de nuestro escuadrón. Aquí no habrá una IA para apoyarnos, sino que debemos intentar hacernos con un equipo completo y que la comunicación sea impecable porque en este caso, el apoyo en equipo es clave para conseguir el éxito.

Este no es un shooter en el que un jugador diga que con él solo vale, sino que realmente es importante trabajar todos juntos para poder obtener el éxito. Suma a esto que podréis gestionar vuestro equipo y que, quizás, no convenga que todos llevéis el mismo tipo de arma, sino elegir esas armas que se complementen así como equipamiento con el que protegernos.

Ready or Not

Otro aspecto es que no se puede esperar reaparecer al morir, sino que una vez la vida se consuma, estarás perdido. Suma a esto que las armas, si se quedan sin munición, se acabó. No vas a poder coger un arma del suelo, por lo que tendrás que plantear muy bien tus movimientos para no cagarla por el camino.

En general, ¿merece la pena Ready or Not?

Tras todo lo repasado y sin querer, de verdad, entrar en muchos detalles para que os dejéis sorprender (y torturar un poco por su IA), llega el momento de la verdad. ¿Merece la pena dejarse llevar por la acción de Ready or Not? Podemos admitir que no se trata de un shooter apto para todos los públicos, no solo por lo complejo, sino por lo dura que resulta su visión. Y sin embargo, se trata de una propuesta muy divertida para jugar con amigos así como un verdadero reto para aquellos que creen que ya no pueden mejorar en los shooter.

Tiene una IA muy avanzada, un auténtico reto que no dejará de sorprenderte. Y realmente se trata de una propuesta que no te dejará indiferente en ningún sentido. Por ello, si te apetece probar un gran reto y demostrar si realmente eres tan bueno como crees en los shooters, esta es la obra que debes incluir a tu colección.