Análisis Batman: Arkham City

"Todas las decisiones que tomas acaban en caos o miseria.

Y en parte, puede que también sean culpa mía..."

Pero también fue más de uno, muchos más si se me apura, los que descubrieron un secreto del que nadie se había percatado hasta entonces. El juego respiraba calidad...

De ese modo tras superar con un amplio margen las cifras de ventas o reservas que esperaban sus creadores, cautivar a la crítica (lo demuestra su 91 en MetaCrític) o recibir numerosos premios GOTY (Game of the Year), sus creadores se pusieron manos a la obra con la secuela del, para muchos, "sleeper" de la generación, secuela que como se demuestra en éste Easter Egg, estaba planeada desde que se pusieron con el primer juego.

Pero ¿cómo iba a poder, como le definía nuestro amigo Blade, el "Nolan de los videojuegos de Batman" reencontrarse con semejantes resultados sin el factor sorpresa, sin el "plus" que da acabar con un tópico como lo es el de que todos los juegos de superhéroes son mediocres?

Rocksteady Studios, a pesar de su corta experiencia en el sector, que más allá de los presentes Batman sólo recoge su trabajo en Urban Chaos: Riot Response, lo tenía claro, rompiendo todos los límites establecidos con el primero, con una ciudad 5 veces más grande, una plantilla de personajes impresionante, un argumento a la altura e incluso una serie de misiones o escenas que pusieran los pelos de punta al jugador.

Ha llegado la hora de que Blogocio valore si ha logrado su misión. Nada fácil, todo sea dicho.

Historia

Hablar de la historia del juego es destripar parte de su magia, hemos de admitirlo. Desde el minuto 0 seremos sorprendidos por la aparición de distintos personajes de la marca que no esperábamos, por eso intentaré transmitiros de la forma más escueta a la par que cuidadosa que pueda este apartado, sin spoiler, excepto del primer juego.

Casi doce meses después de los incidentes del primer título, en el que nuestro héroe, tras quedar encerrado en el psiquiátrico o asilo de máxima seguridad de Gotham, escapaba atrapando a enemigos clásicos como El espantapájaros, Cocodrilo, Enigma o Hiedra, e incluso acabando con los planes de su eterno némesis de hacerse con un ejército de "supersoldados" gracias a una curiosa sustancia denominada "Titán", retornamos a la piel del Caballero Oscuro en un situación que no es tan buena como cabría esperar tras todo lo citado.

La gente de Gotham ha estado contemplando impasible como las prisiones o asilos del lugar se llenan, planeando los mismas cerrar por no poder asegurar mantener a tal cantidad de personas sin problemas. Nadie sabe que hacer... hasta que surge un plan, ¿de moral discutible?, sí, ¿de oscura procendencia?, también, pero un plan, que la gente acoje sin hacer demasiadas preguntas ante el miedo que produce imaginarse una posible fuga en masa.

Se decide encerrar a todos los miembros de dichos lugares en los antiguos barrios de Gotham, algo rehabilitados, donde reine el más fuerte, sin ningún tipo de horario de terapia ni precaución. Únicamente rodeados de impenetrables muros de hormigón, repletos de guardias.

Nace así la "ciudad" que da nombre a esta esperada secuela.