El retraso como especulación

No hace mucho Take 2, imitando a Ubisoft hace unos meses, retrasó algunos de sus lanzamientos para conseguir un producto más redondo. Últimamente las revisiones que hacen las compañías en cada cuarto de año fiscal nos hace temblar a la espera del enésimo retraso. Pero hay muchos más casos, los fans de Alan Wake por fín ven la luz al final del túnel, pero aquellos deseosos de simular la conducción más realista de Gran Turismo 5 no tienen ya uñas que morder.

Mientras tanto, nosotros nos lo tenemos que creer, debemos confiar ciegamente cuando las fechas se alargan en el tiempo pensando que vale más un par de meses en el calendario que no un producto inacabado. Se me viene a la mente el caso de un gran juego que quizás con varios meses más habría mejorado en duración, variedad de enemigos y armas: Dante's Inferno, estaba claro que tenía que salir al menos un mes antes que el rey de su género: God of War 3, pero seguro que a muchos no les hubiese importado esperar por un título más acabado.

No critico los retrasos siempre y cuando sirvan para mejorar aspectos del juego que no han podido cumplirse una vez vencido el plazo inicial, en algunos casos hasta los echo de menos. Sólo quiero que las empresas no jueguen con nosotros en el oscuro negocio de la especulación, que cuiden sus proyectos, no se queden tantas veces cortos con las fechas y saquen sus obras una vez esten acabadas al 100%, ni antes ni despues, aunque las casualidades las hagan coincidir con otros lanzamientos. Uno ya tiene bastante con planificar los gastos del año con tanto título de calidad para que le anden bailando, y además ya sufrimos esos movimientos en las parrillas televisivas, aunque ahí sí se penalizan por ley.