Análisis NyxQuest: Kindred Spirits

Sonido

La música de Steven Gutheinz le hace un gran favor a Nix Quest, ya que ayuda a que nos metamos de lleno en la historia de Nix.

Sin duda este famoso compositor sabe lo que se hace. En sus composiciones no solo se ve representada la belleza de las notas, que se equipara a la belleza de los escenarios, sino que se adivina a la perfección esa sensación de desolación que hay en la tierra (completamente destruida) y el enorme sentimiento de soledad de Nix.

Todas las melodías nos recuerdan a la antigua Grecia, y a todas esas películas en las que hacen aparición los dioses del Olimpo.

En perfecta sintonía con las melodías, se encuentran el resto de efectos sonoros del título, que gozan también de una enorme calidad. La voz de Nix es también estupenda, pero esto no os sorprenderá, pues en Radio Blodec hemos tenido en directo a la chica que se ha encargado de doblar a este personaje. Un saludo a Ana.

En general el sonido de Nix Quest invita a la relajación y al disfrute. Si no os gusta el juego, podéis descargarlo igualmente, aunque solo sea para entrar en una pantalla, y relajaros escuchando su fantástica banda sonora.

Además, si habéis sido de los primeros en descargarlo, os habrá tocado una copia de la misma. Todo un lujo, solo al alcance las mejoras obras de esta industria.

Duración

Sin duda uno de los apartados más flojos de Nix Quest, pero no porque sea corto (de hecho es bastante más largo que Lost Winds) sino porque nos deja con ganas de seguir disfrutando de Nix.

Como en todos los juegos de plataformas, la duración del título está directamente relacionada con la habilidad y la experiencia del jugador.

Si eres un fan del género, y llevas años jugando a títulos de plataformas con scroll lateral, posiblemente su duración ronde las 6 u 7 horas como mucho.

Si eres un jugador no habitual, o alguien que no suele dedicar su tiempo a títulos con este planteamiento, es posible que el juego pueda durarte unas 10 horas, como máximo.

La historia es también bastante bonita. Se basa en la historia de Icaro, de la mitología griega, pero con ciertos toques “made in Over The Top Games”.