NieR: Automata

NieR: Automata, objetivo recuperar la tierra

Por enésima vez, el planeta Tierra se convierte en el campo de batalla improvisado de dos civilizaciones muy diferentes, lo cual acaba generando devastación, ruina y miseria a partes iguales. Donde antes vivía una civilización próspera, ahora solo hay vacío, silencio y máquinas robóticas que se encargan de habitar lo que antes pertenecía a la raza humana, quien ha sido desterrada a la Luna. Evidentemente, en NieR: Automata nuestro objetivo será recuperar lo que nos pertenece. Tras años y años de intensas batallas con el mismo resultado –derrota de los ejércitos terrestres-, la humanidad ha creado un nuevo plan para combatir a estas máquinas: combatir el fuego con fuego. Para ello, se ha creado un ejército androide con habilidades única para el combate, aunque no ha sido suficiente ya que solo han conseguido frenar un poco su avance, pero no derrotarlos por completo. ¿Qué solución hay ante un problema de esta índole? La creación de una nueva unidad con una capacidad más devastadora en combate: la infantería YoRHa.

Esta unidad de infantería de Nier: Automata está formada por una serie de androides, tanto de ataque como de soporte, que poseen grandes habilidades y están perfectamente capacitados para derrotar al ejército invasor. A esta unidad pertenecen 2B, la protagonista de la obra desarrollada por Platinum Games, y también 9S, un androide que nos ofrecerá soporte en combate y nos proporcionará información en todo momento, entre otras cosas por supuesto. Evidentemente, la unidad de infantería YoRHa contará con otros miembros, a los cuales iremos conociendo a lo largo de nuestro periplo por NieR: Automata. Pero los miembros de esta unidad no son los únicos a los que veremos  en esta entrega ya que, gracias a su formato jugable, podremos conocer a otro tipo de personajes, algunos de ellos con problemas que deberemos resolver. En NieR: Automata, además de la historia principal, también tendremos a nuestra disposición otros eventos argumentales para darle más profundidad a la experiencia. Y es que, aunque no lo parezca, la obra del estudio japonés es un juego de mundo abierto.

Un mundo devastado… y abierto

Platinum Games siempre se ha caracterizado por desarrollar juegos lineales donde la acción era la máxima expresión jugable. Bayonetta, The Wonderful 101 o Vanquish, sin ir más lejos, son un buen ejemplo de acción desmedida y poca exploración. No obstante, en NieR: Automata el estudio japonés ha cambiado (imaginamos que por obligación) el chip y el trabajo desarrollado con esta entrega ha sido muy diferente en comparación con otros proyectos; 'NieR: Automata' es, posiblemente, lo más ambicioso que han creado hasta la fecha. La demo publicada en diciembre de 2016 no dejaba ver ese mundo abierto ya que se basaba en una zona más cerrada, más parecida a los juegos anteriores. Por suerte, la versión que pudimos probar sí nos dejó comprobar cómo es ese mundo abierto, cuáles son las opciones nos brinda y qué nos vamos a encontrar una vez que pongamos los pies en él. Una cosa es segura, vamos a tener que andarnos con mucho cuidado, pues la Tierra ya no es la que era.

Desolación. Esa es la palabra perfecta para describir lo que nos vamos a encontrar en NieR: Automata una vez que 2B llegue al planeta. Las ciudades se han convertido en ruinas y, donde antes se levantaban majestuosos edificios, ahora solo hay verde, enormes árboles e incluso animales campando por el terreno. El mundo de NieR: Automata evoca rápidamente a la memoria una sensación de soledad indescriptible, pero también de peligro constante. A pesar de que no parece haber nada a nuestro alrededor, muy pronto nos daremos cuenta de que no es así, pues en varias zonas nos encontraremos con enemigos robóticos a los que tendremos que despachar, ya sea para cumplir una misión en concreto o desbloquear una serie máquinas, custodiadas por un grupo de enemigos menores y a los que no tardaremos en dar aire, que nos ayudarán a ver cómo es el terreno y qué nos vamos encontrar en él. La exploración, como os podréis imaginar, es un elemento clave en la obra de Platinum Games.

La zona (de otras tantas que hay por supuesto) que hemos visitado en esta demo es una antigua ciudad que ha sufrido los efectos de la guerra entre la humanidad y los invasores alienígenas. Completamente devastada, con edificios derruidos y deshabitados, nada queda ya en esta ciudad que merezca la pena ser salvado. No obstante, 2B tiene una misión que cumplir y nos tendremos que poner manos a la obra y dar con un asentamiento situado en una zona del escenario, lejos de los posibles peligros que representan las máquinas. Una vez que hemos llegado, veremos que el lugar está habitado por miembros de la resistencia, los cuales tienen para nosotros algunos encargos especiales, tanto principales como secundarios. Realizarlos nos recompensará con experiencia, materiales y dinero que podremos usar para comprar todo tipo de armas a uno de los personajes que nos encontraremos en el asentamiento (previa realización de una misión) y otros objetos que nos ayuden en nuestra aventura, como elementos curativos por ejemplo y otros que mejoren nuestro ataque, defensa, etc.

Dado que NieR: Automata es un juego de mundo abierto, es lógico pensar que hay algunos secretos por descubrir a lo largo y ancho del escenario y otras acciones a realizar, además de las misiones secundarias. Durante nuestro periplo, nos hemos encontrado repartidos por el escenario una serie de cofres y cuyo contenido no podemos revelaros porque no pudimos abrir ninguno; 2B necesitaba algo para poder abrirlos y no lo encontramos (quizás una llave especial). Además de buscar ese algo para los cofres, 2B tiene la capacidad de pescar en los lagos y riachuelos que hay en este escenario, para lo cual usará a su Vaina, un robot que la acompañará en todo momento. Si habéis jugado a la demo, recordaréis que su principal función es la de atacar a los enemigos. Pues también sirve para pescar o para que 2B pueda tirarse desde grandes alturas, agarrarse a él y poder planear durante un breve espacio de tiempo y así evitar que la protagonista pueda hacerse daño. Es una navaja suiza de última generación.

2B, un androide muy humano

En NieR: Automata, la gran protagonista es 2B, una androide creada para recuperar la Tierra de la invasión extraterrestre y que forma parte de la infantería YoRHa. Nada más verla, y no hablamos del atuendo que el señor Yoko Taro ha creado para este personaje, nos damos cuenta que 2B no es un androide cualquiera. El personaje tiene una fuerte personalidad y un carácter que casi podría ser catalogado como humano. El comportamiento de 2B es impropio de lo que uno puede esperar de un androide, pues en ciertos momentos veremos que parece cuestionar las órdenes que se le asignan o la forma de realizar algunas cosas. Hay algo más en 2B… ¿está cansada de que la usen como un arma?, ¿quiere algo más? Como es evidente, tendremos que esperar para descubrirlo. Mientras esperamos, lo mejor que podemos hacer es ver cómo se las gasta la protagonista de NieR: Automata. 2B, a pesar de su aspecto, es un androide letal y está perfectamente capacitada para entablar combate con cualquiera que se le ponga por delante.

Como buen juego de Platinum Games que es, lo primero que se viene a la mente es que nos vamos a encontrar con un personaje muy dinámico, ágil y habilidoso capaz de ejecutar rápidos movimientos con el arma que lleve equipada. Pues así es. 2B es un portento en el uso de armas blancas (ya sean ligeras o pesadas) y ejecuta tanto movimientos rápidos para encadenar golpes a velocidad vertiginosa, como pesados pero más lentos para hacer mucho daño al oponente. Si habéis jugado a Bayonetta, no os costará nada haceros con el control 2B ya que es casi idéntico. En otro orden de cosas, comentar que la protagonista puede portar dos armas diferentes (las que queramos de una amplia variedad), pudiendo equipar varios sets diferentes y cambiarlos en tiempo real dependiendo de las circunstancias que se den en ese momento. Cada arma irá asignada a un botón concreto y, por supuesto, podemos alternarlos para ejecutar diferentes combinaciones de ataques. En este aspecto, como suele ser costumbre, Platinum Games no decepciona.

Además de poder portar todo tipo de armar (incluidos sus puños), 2B tiene acceso a una serie de habilidades concretas, a las cuales podemos acceder subiendo de nivel realizando misiones o derrotando enemigos. NieR: Automata no es solo acción en un mundo abierto, sino que también tiene un punto RPG gracias a este aspecto y a la personalización del equipo. Las armas, por ejemplo, se pueden mejorar con materiales que iremos recogiendo del escenario y dinero, aunque no será lo único por supuesto. La obra de Platinum Games mezcla con buen acierto varios géneros, lo cual es una buena noticia para el usuario ya que podrá disfrutar de una obra compleja y variada en todos los sentidos. A priori, NieR: Automata se perfila como un título a tener muy en cuenta si nos gustan las grandes historia, la acción vertiginosa, la exploración y los elementos RPG. Eso sí, tendremos que esperar hasta el 10 de marzo para comprobar si todos estos conceptos casan a la perfección.

Platinum Games, sinónimo de espectáculo

Para ir terminando con estas impresiones, vamos a hablar del aspecto técnico y visual de NieR: Automata. Antes de nada, comentar que la obra de Platinum Games llegará en primera instancia a PlayStation 4, que es la versión a la que hemos podido acceder. Visualmente, no parece un título que destaque mucho en la plataforma de Sony, pero es que hay que hacer algunos sacrificios para ofrecer una experiencia jugable a 60 frames por segundo; eso sí, la versión para PlayStation 4 Pro contará con mejoras visuales. En juegos como NieR: Automata es imprescindible alcanzar una tasa de fotogramas alta para que la experiencia sea fluida, por lo que este ha sido el objetivo principal del estudio nipón. Eso se ha traducido, en PlayStation 4 por lo menos, en no alcanzar los 1080p de resolución y en un apartado técnico general que cumple. Eso sí, gracias a los 60 frames se consigue un título espectacular, el cual vendrá adornado por enormes parajes, efectos de iluminación y partículas muy conseguidos, y un apartado artístico resultón. La versión final de NieR: Automata nos ofrecerá mucho más.