Análisis Donkey Kong Country

Se lo ha "currado" Ryuhei, felicitaciones por el análisis y os lo recomiendo, tanto leer el trabajo de este genial redactor, como descargaros el juego. ¡Disfrutadlo!

Donkey Kong Country es un excelente juego de plataformas 2D que supuso una gran evolución técnica en Super Nintendo. Por primera vez el uso de gráficos prerrenderizados (comprimir un modelo 3D en animaciones o imágenes 2D) permitía animaciones suaves y completas con escenarios y personajes muy definidos.

Aunque anteriormente otros juegos como los primeros Mortal Kombat también usaban gráficos renderizados, los luchadores se mostraban bastante borrosos y sus movimientos eran bruscos y poco naturales.

En cambio, el perfeccionamiento de esta técnica consiguió que DKC fuese uno de los juegos más aclamados gráficamente hasta la llegada de las nuevas consolas 3D.

El método de juego se basa, de manera similar a Super Mario World, en diversas zonas divididas en niveles, en total unas 50 fases de saltos y enemigos.

En ellas, los dos protagonistas, los monos Donkey Kong y Diddy Kong, intentan recuperar su más preciado tesoro: su provisión de bananas.

Desde el primer nivel se aprecia la cuidada estructura de cada fase, de desarrollo horizontal: con tan solo un botón de ataque y otro de salto, el desarrollo es entretenido y desafiante, con saltos al límite, enemigos a los que derribar o evitar, lianas, plataformas móviles, y caminos y habitaciones ocultas por descubrir.

La posibilidad de cambiar en cualquier momento entre los dos monos que podemos controlar (Donkey es más fuerte contra los enemigos, Diddy es más rápido y ágil) proporciona un interesante toque estratégico a las partidas.

La dificultad está bien ajustada: niveles primeros para familiarizarse y fases avanzadas que habrá que repetir varias veces para lograr esa sucesión de saltos perfecta o evitar a incómodos enemigos.

El diseño de los niveles es muy bueno, tanto a nivel visual como de estructura, y aunque predominan los saltos, existe la suficiente variedad de situaciones y peligros como para no aburrir, incluyendo fases acuáticas, los inolvidables toneles cañón o las vagonetas, y la posibilidad de montar en varios animales amigos a modo de vehículo en sitios concretos.

El control de los monos protagonistas es perfecto tanto con Mando Clásico como con el de GameCube, pero como para la mayoría de juegos de la CV, recomiendo el uso del Mando Clásico, pues su cruceta y posicionamiento de botones lo hacen más cómodo.

Los gráficos, doce años después de su lanzamiento, continúan siendo excelentes, como ya he dicho de lo mejor que se vio en la era 2D. La conversión para la Consola virtual se muestra fluida y con la velocidad del original.

En el apartado sonoro, efectoscorrectos y melodías de enorme calidad tanto técnica como artística. En cuanto a la duración, quizá es su punto débil para aquellos ya expertos en el manejo de la cruceta, pues a pesar de su dificultad media-alta, esas 50 fases se quedan algo cortas. Un jugador medio invertirá unas 6 horas en llegar al enemigo final, y, aunque no se hayan descubierto todos los secretos y llegar al 100% completado, lo cierto es que esos secretos no suelen ser más que algún minijuego o sala en las que reunir más vidas u objetos.

En definitiva, uno de los mejores juegos de plataformas 2D de la historia, de un nivel técnico bidimensional muy alto, al que su algo limitada duración no empaña sus enormes virtudes de diseño y jugabilidad.

Actualización del análisis

Se me olvidaron algunos detalles interesantes; Primero, que DKC tiene dos modos de juego para dos jugadores; Contest y Team. Ambos son de manejo alternativo, es decir, primero juega un jugador y luego el otro (lógico), y ambos consisten en pasarse el modo individual ya comentado, pero asignando a cada jugador el manejo de un mono -repito, alternativamente- (Team) o compitiendo por puntuacion, pasando las fases y cambiando de jugador cuando el otro pierde una de las vidas (Contest). No aportan demasiado, pero es un detalle.

Segundo, que en juegos como este DKC se agradece MUCHO la opcion que tiene la Consola Virtual de "hibernar" la partida, simplemente presionando el boton "home" en cualquier momento, podemos salir al menu de Wii y apagar la consola, y cuando volvamos a cargar el juego, aparecerá exactamente en el mismo momento de juego en el que lo dejamos.

Teniendo en cuenta la escasez de puntos de guardado en DKC (uno cada cinco o seis fases), el detalle es genial. Esta opción es aplicable a cualquier juego de CV, excepto a los de N64.

Y por último comentar, que, efectivamente, el manejo pierde bastante con el mando de gamecube, no es injugable pero no se obtiene la precisión necesaria que proporciona la cruceta y botones del mando clásico.