El Contraanálisis... LittleBigPlanet

Contraanálisis

Segunda premisa: Crear. Y como límite la imaginación. Es sin duda la mayor vitalidad que se le puede dar un juego, convertir a sus usuarios en creadores y editores de su prolongación en el tiempo. Los más de 84.000 niveles que ya han sido creados son buena muestra de ello.

 Porque tan divertido es jugar como realizar tu propia creación. Eso sí, debemos ser pacientes y tener muy claro lo que queremos hacer antes de zambullirnos en nuestro proyecto; de otro modo, estaremos constantemente borrando y eliminando sin tener nada definido. Hay que probar muy bien nuestras creaciones, ver que las físicas funcionan correctamente y que no se cierran las puertas a soluciones alternativas. Algunos de los muchos niveles que existen actualmente, o los pasas a la primera o no tienes más remedio que reiniciarlos porque no te permiten seguir.

Todo lo que hemos encontrado lo podemos usar, todo lo que creemos lo podemos compartir mediante burbujas de premio que regalaremos a nuestros visitantes. Un universo de imaginación infinita se abre paso a través de este editor que dispone de más de hora y media de fantásticos e ilustrativos tutoriales para enseñarnos el funcionamiento de todos los elementos. En cuanto a los Sackboys, os aseguro que encontraréis todo tipo de creaciones a lo largo y ancho del universo LBP. La combinación de colores, texturas, materiales, trajes, gorros, gafas, bigotes, etc es tal, que resulta muy difícil encontrar dos personajes iguales.

El tratamiento de la música y el sonido es único por ejemplo. Se pueden utilizar melodías grabadas, mezclarlas en diferentes modos y hacer que suenen cada vez que un Sackboy pasa cerca de uno de sus altavoces.

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En mi humilde opinión, la selección musical que se ha realizado para este juego es, simplemente, fantástica. Las melodías son pegadizas, los sonidos adecuados, las tiras sonoras que acompañan a los muñecos simpáticas y divertidas, y las canciones, geniales. Es fácil terminar tatareando alguna de las muchas canciones o melodías que componen los niveles. Café Tacuba suena ya en multitud de mp3 por todo el mundo. El doblaje realizado por Cristian Gálvez para explicar los distintos tutoriales resulta agradable y ameno; un detalle que ha sido muy cuidado para entender los mensajes que Little Big Planet nos envía. Todo esto hace mucho más divertido el juego en sí, dotándolo de una agradable banda sonora que no resulta nunca extravagante. Un acierto musical en toda regla.

La última parte es "Compartir", y de la misma manera que los dos primeros elementos, Media Molecule ha golpeado con fuerza en este terreno. Después de crear un nivel, puede tomar la decisión de compartirlo. En cuanto ha hecho esto, el nivel está disponible para jugar para todo el mundo.

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Tercera premisa: Compartir. Porque de nada serviría todo el trabajo que realicemos creando si no podemos ponerlo a disposición de todo el mundo para disfrutarlo. Nada más gratificante que ver cómo aparecen desconocidos por tu mundo imaginario y juegan con tus creaciones. El sistema de "Adorados" permite además hacer una selección de favoritos a los que siempre te resultará fácil acceder. Pero de nuevo encontramos algunas limitaciones. El sistema de búsqueda es algo inexacto, dificultando encontrar lo que quieres con facilidad.