Análisis Yooka-Laylee

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Yooka-Laylee: Regresa el dúo dinámico

Playtonic Games publica su primer videojuego, Yooka-Laylee, un título de vieja escuela que entremezcla un buen número de géneros diferentes

Plataforma analizada: PS4
18/04/2017 10:43
Dos inseparables amigos, el camaleón Yooka y el murciélago Laylee, se embarcan en una aventura en busca de un libro que les fue birlado por el malvado abejorro Capital B. Esta aventura obligará a nuestros protagonistas a explorar la Colmena del Saber, la guarida en la que Capital B maquina sus malévolos planes para hacerse con el control de los mercados financieros. ¿Su avaricia romperá el saco? Análisis Yooka-Laylee.
Yooka-Laylee

Yooka-Laylee: Salud, dinero y humor

En un insólito mundo dominado por el dinero, Capital B pone manos a la obra a Dr. Cuack y su séquito de pequeños monstruos para llevar a cabo una acción financiera "ejemplar": monopolizar la venta de libros. Para transformar esto en una realidad solo es necesario accionar el Novelizador 64, el último invento del Dr. Cuack. Este aparato permitirá a Capital B absorver todos los libros del mundo para luego vender estos a un precio tan alto como se desee, pues no habrá competencia.

Yooka y Laylee, por su parte, se encuentran disfrutando de una buena tarde al sol, hasta que ven que su propio libro mágico empieza a volar hacia el Novelizador 64. Por suerte, las páginas de este libro se autoarrancarán y quedarán desperdigadas a lo largo de la Colmena del Saber, evitando un éxito total en los planes de Capital B y compañía. Ahora, el dúo camaleón-murciélago debe ponerse manos a la obra, hay que recuperar todas las páginas del libro único que nos acaban de robar.

Por el camino nos encontraremos con nuevos compañeros de viaje que nos ayudarán en nuestra aventura. La serpiente Trowzer será quien nos enseñará a aprender diferentes técnicas de ataque y movimientos especiales para Yooka y Laylee, mientras que el dinosaurio Rextro nos invitará a jugar en máquinas arcade y la vagoneta Kartos nos animará a recorrer circuitos sobre raíles. Pero por nuestra odisea también nos encontraremos con otros muchos personajes, algunos de aparición puntual y otros reiterativos, que aportan una gran variedad de NPC's a Yooka-Laylee.

Imagen asociada al video 37066

Plataformas, puzzles, disparos, acción...

No hay un género específico para clasificar a Yooka Laylee, sino que el juego cuenta con mecánicas de múltiples géneros diferentes. Por momentos, estaremos jugando a un título de plataformas en el que debemos avanzar saltando, rodando o incluso volando, pero la obra de Playtonic Games también tiene toques de aventura, puzzles, carreras, disparos, acción, arcade... La diversidad de géneros de la que hace gala Yooka-Laylee hará las delicias de los jugadores que buscan variedad y diversión en los videojuegos.

Principalmente en Yooka-Laylee tenemos la difícil misión de recuperar todas las páginas (Pagies) del libro robado por Capital B, pero a estas Pagies se le suman un buen número de coleccionables distribuidos por los diferentes mundos de juego. En la Colmena del Saber tendremos dispuestos una serie de Grandes Tomos, y cada uno de ellos nos sirve de portal para acceder a los diferentes mundos del juego. Para abrir un Gran Tomo necesitamos un número específico de Pagies, teniendo la posibilidad de ampliarlo pagando con más Pagies aún.

Conseguir una Pagie tiene cierto valor, pues en ningún caso se nos regala así porque sí, antes tendremos que escalar una zona, lograr la solución a un puzzle, enfrentarnos a una serie de enemigos o incluso, lo que es más habitual, combinar una serie de acciones diferentes. Para rematar, además de todos los coleccionables de cada mundo, también están los infames jefes finales, con quienes nos tendremos que enfrentar en épicas batallas que pondrán a prueba nuestra habilidad e ingenio a partes iguales.

Yooka-Laylee

A todo color al ritmo del compás

Desde un punto de vista general, Yooka-Laylee no es tampoco fácil de clasificar en cuanto al tamaño y cantidad de mundos se refiere. Pocos mundos pero de enorme tamaño, sin llegar a ser un juego de mundo abierto, pero quedándose muy cerca. Esto provoca una serie de ventajas e inconvenientes, que, dependiendo del perfil de jugador, serán mejor o peor vistas.

Obviamente tener pocos mundos de juego impide disfrutar de múltiples ambientes diferentes, pero también favorece al factor exploración y al coleccionismo, siendo este último quizás uno de los puntos más fuertes del juego. Pero por la contra también tenemos lo inevitable: en varias ocasiones daremos largas caminatas, algunas de ellas en balde, pues entre que los mundos de juego son grandes y que los objetos coleccionables, a priori, no sabemos donde se esconden, caminar de más se convierte en algo obligatorio. Además, mientras no disponemos de todas las habilidades, en los primeros mundos iremos dejando atrás algunas Pagies y Plumas Doradas imposibles.

Pese a la simplicidad poligonal en el diseño de personajes y escenarios, el nivel artístico de Yooka-Laylee está fuera de toda duda

Salta a la vista, y nunca mejor dicho, el colorido mundo que compone Yooka-Laylee. Pese a la simplicidad poligonal en el diseño de personajes y escenarios, el nivel artístico del juego está fuera de toda duda. Los tonos claros dan una mayor expresividad a los personajes, mientras que el mundo por el que nos movemos adquiere un aspecto cartoon, muy a tono con un videojuego dirigido a todos los públicos.

El título de Playtonic Games usa el motor de juego multiplataforma Unity, logrando una gran portabilidad entre sistemas diferentes, permitiendo que incluso en un futuro Yooka-Laylee llegue a Nintendo Switch, pese a que no estaba dentro de los planes iniciales. En un aspecto ya mucho más técnico, Yooka-Laylee tampoco está exento de pequeños problemas en forma de glitches y ligeras correcciones de cámara. En algún momento puntual estos pueden llegar a ser determinantes, algo que enojará mucho al jugador, pero que también podría ser corregido en futuras actualizaciones.

Yooka-Laylee

Para acompañar a esta obra, Playtonic Games ha contado con dos de los más destacados compositores de los videojuegos: David Wise y Grant Kirkhope. Ambos de nuevo nos han brindado con melodías que rebosan magia por doquier. Solo una cosa se puede echar en falta en esta banda sonora, y es un mayor número de melodías. Aquí de nuevo se notan los escasos mundos de juego de Yooka-Laylee, aunque al menos cada uno de ellos cuenta con tres versiones diferentes de su melodía autóctona.

Lo prometido es deuda

Yooka-Laylee es ya toda una realidad. El juego de Playtonic Games ha cumplido con todo lo que se le exigía y pese a que no es un juego perfecto, su calidad es más que notable. Pasárnoslo puede suponernos entre 20 y 30 horas, mientras que alcanzar el 100% nos llevará entre 10 y 20 horas a mayores. Algunos verán en él un juego "arcaico"; los gráficos no son punteros y la jugabilidad es muy similar a la de otros videojuegos de Nintendo 64. Que no quepa duda, estas dos afirmaciones son tan ciertas en Yooka-Laylee como en "el mejor videojuego de la historia".

Rareware ha vuelto, ahora se llama Playtonic Games.

8

Lo mejor

Grandes dosis de humor inteligente

Muy variado y divertido de principio a fin

Banda sonora de lujo

Enorme cantidad de coleccionables

Lo peor

El combate final es muy mejorable

Algunos glitches llegan a entorpecer la experiencia de juego

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