Análisis Wolfenstein II: The New Colossus

Wolfenstein 2: The New Colossus – La resistencia en Nintendo Switch

Bethesda Game Studios es una de las compañías que, durante años, apenas ha tenido trato con Nintendo y sus consolas, negando el lanzamiento de todos y cada uno de los juegos que han desarrollado hasta la fecha. No obstante, esta situación ha cambiado en el último año gracias a llegada de Nintendo Switch. El nuevo sistema de la compañía japonesa ha logrado lo que sus últimas antecesoras no han podido: tener varios juegos con el sello de Bethesda Game Studios. El año pasado llegaron The Elder Scrolls V: Skyrim y Doom; este año le toca el turno a Wolfenstein II: The New Colossus , el primero en llegar a una consola de Nintendo desde Wolfenstein 3D en Super Nintendo. Ya ha llovido…

El título de MachineGames, que debutó el año pasado en otros sistemas, llega a Nintendo Switch con la vitola de ser uno de esos títulos destinados a un público adulto que durante tanto tiempo han rehuido a  la compañía japonesa. Títulos que, poco a poco, vuelven a estar presentes para eliminar por completo esta tendencia a pensar de que Nintendo=Niños. La consola híbrida está cosechando un catálogo plagado de diversidad y Wolfenstein2: The New Colossus es un ejemplo claro de ello ya que va destinado a un público adulto, lo cual es de agradecer. Un ejemplo donde la acción, la violencia, la guerra y otros elementos harán las delicias de los amantes de este tipo de juegos.

No cabe duda alguna de que Bethesda Games Studios, por lo menos durante el primer año de vida de la consola, se ha tomado muy en serio el darle soporte con algunos de sus títulos más conocidos. Cuánto tiempo durará esto es algo que desconocemos, por lo que disfrutaremos cada segundo que ofrezcan cada una de las diferentes propuestas que hay disponibles. Y eso es precisamente lo que hemos hecho con Wolfenstein 2: The New Colossus, cuyo análisis vamos a tratar en las próximas líneas. Al cargo de esta entrega se encuentra el estudio Panic Button Games, encargado de portear también Doom y que, de nuevo, ha hecho un trabajo destacable con el hardware que presenta Nintendo Switch. Eso sí, no es perfecto.

Wolfenstein 2: The New Colossus

"Terror Billy" al rescate del mundo

Wolfenstein 2: The New Colossus sitúa su historia unos pocos años después de los hechos acontecidos en The New Order y el protagonista sigue siendo el capitán B.J. Blazkowicz, al que dejamos en la anterior entrega combatiendo contra Wilhem “Calavera” Strasse y alcanzando la victoria. Una victoria que fue efímera y con un alto precio. Varios años han pasado desde entonces y el ejército nazi es el dueño absoluto del mundo tras la abdicación de Estados Unidos; nadie es capaz de hacerle frente y dominan a placer. ¿Dónde está Blazkowicz? ¿Dónde está el gran héroe de guerra? La respuesta se resuelve pronto, pues tras volver del coma nos pondremos a los mandos del personaje y nos adentraremos en una batalla para acabar con la opresión nazi.

En el título de MachineGames, los jugadores pondrán rumbo a varias zonas de Estados Unidos para intentar poner fin al dominio de los nazis, quienes han instaurado sus propias reglas y forma de vida, ética y otros aspectos en los ciudadanos de este gran país. O mejor dicho, de lo que antes era un gran país que actualmente se encuentra en ruinas. Nada más poner los pies en Estados Unidos, concretamente en la ciudad de Nueva York y no sin antes acabar con algunos cuantos nazis, veremos que no queda nada de lo que antaño fue una ciudad llena de vida, grandes rascacielos y mucho bullicio. El poder de los nazis ha hecho mella en cada centímetro de la ciudad y ahora solo quedan ruinas, silencio y radiación.

En compañía de Terror Billy, los jugadores de esta versión para Nintendo Switch tendrán que visitar varias zonas repartidas por todo Estados Unidos, acabar con todos y cada uno de los soldados del ejército nazi y liderar a la resistencia hasta un futuro donde la palabra esperanza no sea una quimera. El protagonista de Wolfenstein 2: The New Colossus va a tener por delante una tarea muy dura, pero para ello contará con la inestimable ayuda de un elenco de personajes formados por Anya, el doctor Set y muchos otros más que lo ayudarán –y a los jugadores-, en un peligrosa misión. Además, para ello contaremos con un arsenal de armas de lo más variadas y potencialmente devastadoras. Coged vuestro laserkraftwerk y a pulverizar nazis.

Wolfenstein 2: The New Colossus

Acción, sigilo y exploración

La serie Wolfenstein ha ofrecido siempre una jugabilidad FPS de la vieja escuela, es decir, acción frenética con movimientos veloces y donde no hay un momento para el respiro cuando entran en escena los enemigos. A esto hay que añadir que para curarse hay que coger botiquines y para recuperar la armadura hay que recoger los trozos que suelten los enemigos o los que encontremos por el escenario; aquí, como en Doom, no hay regeneración de nada. La premisa es esta entrega sigue siendo la misma, pero con el añadido de poder movernos por el escenario con el más absoluto sigilo para acabar con los enemigos. Un escenario en el que solo nos dedicaremos a pegar tiros como locos, sino también a explorar cada rincón.

Wolfenstein 2: The New Colossus no es un FPS al uso, pues además de contar con una historia elaborada y un modo single player único (sin multijugador), ofrece a los jugadores otra serie de mecánicas, como por ejemplo el coleccionar una serie de extras que encontraremos repartidos en cada uno de los escenarios. En este aspecto, el título de MachineGames está bastante servido, pues podemos encontrar desde ilustraciones, pasando por juguetes, discos y cromos, hasta las denominadas cartas de la muerte. A esto tenemos que añadir los documentos que sirven para conocer más del lore, lo cual es fundamental, y de los que hay hasta 150 diferentes repartidos por todo el escenario. En resumen, matar y avanzar no es lo único que haremos en el juego.

Los soldados nazis, así como los diferentes artilugios que usan para la guerra, no serán fáciles de derrotar, por lo que necesitaremos toda la ayuda posible en forma de armas. Terror Billy tendrá a su disposición un arsenal bastante amplio y que, además, podremos mejorar gracias al uso de los "kits de mejora" que encontraremos repartidos a lo largo de los niveles. Cada arma contará con varias opciones, entre las cuales están la implementación de un silenciador, ideal para el sigilo, una mira de francotirador para atacar desde la distancia,  cargadores más grandes por si os gusta apretar el gatillo a fondo, y más cosas. Las opciones de personalización, gracias al número de armas, son bastante elevadas y os permitirá adaptar el arsenal de B.J. a vuestro gusto.

La personalización de las armas no es el único aspecto que podremos configurar, pues el protagonista de Wolfenstein 2: The New Colossus cuenta con un árbol de habilidades dividido en tres ramas: Sigilo, Destrucción y Táctica. Cada una de ellas cuenta con seis parámetros cuya mejora dependerá del uso que hagamos de ellas. En Sigilo, por ejemplo, hay una relacionada con el lanzamiento de hachas y cuyo dominio irá mejorando cuantos más enemigos matemos con ellas; en Destrucción, encontraremos un parámetro que aumentará la capacidad de las granadas matando enemigos; en Táctica hay una opción relacionada con las bajas por tiros en la cabeza, que al aumentarla hará que mejore el daño al apuntar desde la mira. Así con todos y cada uno de los parámetros.

Wolfenstein 2: The New Colossus

Luces y borrosidad en la versión para Nintendo Switch

Al cargo de esta entrega se encuentra, por tercera vez en apenas un año, el estudio Panic Button Games, que ha sido la encargada de adaptar Doom y Rocket League a la consola con resultados bastante buenos. Ambos títulos, sobre todo tras algunas optimizaciones posteriores, han logrado un acabado técnico casi impensable en un sistema que apenas pesa 350 gramos. Wolfenstein 2: The New Colossus hace uso del mismo motor que Doom, es decir, el Id Tech 6 y viendo los resultados conseguidos en el título de Id Software podemos pensar que se han repetido en esta entrega. La verdad es que hay luces y sombras o, mejor dicho, borrosidad, tanto en modo TV como en Portátil/Tabletop. ¿Afecta esto a la jugabilidad? Un poco.

En modo TV, Wolfenstein 2: The New Colossus se ejecuta a un máximo de 720p de resolución, pero no es fija y en momentos de estrés veremos que decae hasta un punto en el que la calidad de imagen presenta cierta borrosidad que puede llegar a molestar, especialmente cuando los enemigos están a cierta distancia. Esta borrosidad se acentúa en el modo Portátil/Tabletop, donde la consola de Nintendo no rinde al 100% de su capacidad; no ayuda que en esta modalidad la resolución sea sub-HD en todo momento y no escale hasta el máximo que ofrece en Portátil/Tabletop. No sabemos si este rendimiento se debe a una falta de optimización –algo que pasó con Doom- o que no se puede sacar más del Tegra X1…

Evidentemente, alcanzar el nivel visto en el resto de versiones es completamente imposible, pero esperábamos algo con un acabado bastante mejor al que presenta. A nivel general, nos vamos a encontrar exactamente lo mismo que en Doom, es decir, un título cuyos parámetros gráficos han sido reducidos al mínimo para poder funcionar en Nintendo Switch, una tasa de frames anclada en 30, muy sólida eso sí, modelados de personajes correctos, efectos de iluminación bastante interesantes y un fuerte uso de Anti-Aliasing. El que busque una experiencia gráfica muy detallada y elaborada, aquí no la va a encontrar eso seguro. Es más, nos hace preguntarnos hasta qué punto merece la pena ofrecer un producto así, con tantos recortes, entre ellos algunos que empañan la experiencia jugable.

Wolfenstein 2: The New Colossus

Una experiencia con altibajos

A título personal, no puedo decir que esté especialmente contento con los resultados que muestra Wolfenstein 2: The New Colossus en el sistema híbrido de Nintendo. La excesiva borrosidad de la imagen es un problema que no se puede dejar pasar por alto porque afecta a la jugabilidad, sobre todo en portátil. Se puede tolerar texturas en baja resolución, efectos de partículas de menor calidad, incluso ver dientes de sierra, pero la definición de la imagen es capital. Podemos decir lo mismo de la tasa de frames, pero esto es lo que hay cuando el sistema al que va destinado no está al nivel del resto por culpa de una política de "ofrecer algo diferente". Nintendo Switch es un buen sistema, pero no se le puede pedir el cielo.

Lo positivo de la versión de Wolfenstein 2: The New Colossus destinada a la consola de Nintendo es que no está censurada, que tiene todo el contenido base y sin recortes, que a pesar de la borrosidad es disfrutable en portátil y que tiene control por giroscopio desde el primer día. Quitando el apartado técnico, el resto está al mismo nivel que el resto de versiones. Ahora solo falta por saber si Bethesda Game Studios tiene previsto poner a la venta el pase de temporada que añade nuevos capítulos de historia y así ofrecer la experiencia al completo. De momento, tendremos que conformarnos con la experiencia base, que no es poco.