Análisis Spider-man: Edge of Time

Historia

Corre el año 2099. Walter Sloan, un científico de  la compañía Alchemax planea retroceder en el tiempo para refundarla antes mucho antes de su inauguración. Miguel O'Hara o, mejor dicho, Spider-Man 2099 no es ajeno a sus planes pero llega tarde para impedir que Sloan atraviese un portal dimensional que afecta la linea temporal en la que se encuentra Peter Parker el cual sin saberlo se convierte en trabajador de Alchemax en lugar de ser el precario fotógrafo del Daily Bugle. La compañía Alchemax controla prácticamente todo, y aparentemente también el clima porque está todo muy oscuro. O'Hara, gracias a una muestra de ADN de Parker, logra establecer un vínculo cronológico que le permite establecer comunicación con el que fuera el primer Spider-Man. Una vez puestos en contacto, los amigos aracnidos se dispondrán a trabajar anacrónicamente para deshacer la maleza de Sloan y devolver a su estado original el flujo del tiempo.

Paradojas temporales para dar y vender. La propuesta del reputado guionista de comics Peter David ha de cogerse de manera casi dogmática, sin buscarle tres pies al gato, o nos volveremos locos intentando buscar sentido a la paranoia temporal que nos propone. Una vez asumimos que el efecto mariposa no existe y le concedemos al título todas las licencias de imaginación del mundo, podemos comenzar a disfrutar un poquito del escaso argumento del juego, moviéndonos en dos lineas temporales simultaneas. Total, si ya lo hizo antes Tim Schafer en Day of the Tentacle y no nos quejamos... Independientemente de la premisa de la historia, a nivel narrativo esta muy bien desarrollada, metiéndonos en el meollo desde el minuto cero y no soltándonos hasta el final. Lo único reprochable de la historia es la intervención de Mary Jane, muy metida con calzador en un episodio que no aporta nada a la trama.

Una de las virtudes de la aventura es el acertado carisma impreso en ambos personajes protagonistas. Si Spider-Man esta por el medio, es de esperar que este lance repetidas telarañas de humor fanfarrón y simpático que, asombrosamente, funciona muy bien y contrasta con la resignación de Miguel O'Hara, un hombre de carácter sosegado que piensa con frialdad ante las adversidades. Buena definición, por tanto, de los personajes que aparecen en el juego.

Jugabilidad

No voy a engañar a nadie. Este juego no innova absolutamente nada en lo que a jugabilidad se refiere. Estamos ante un enésimo juego beat'em up en el que tendremos que abrirnos paso entre hordas de enemigos para alcanzar el objetivo que nos permitirá avanzar de nivel. También se utiliza aquí un sistema de orbes que, al almacenarlos tras patear traseros, nos permitirá comprar mejoras y aumentar las habilidades de Amazing Spider-Man, Spider-Man 2099 o las que ambos tienen en común. A parte de los orbes, para ciertas mejoras será necesario recolectar arañas doradas, desbloqueadas tras acabar completamente con una horda de enemigos concreta o ubicadas en rincones escondidos del mapeado para apelar al sentido de coleccionismo de los cazadores de logros o trofeos.