Análisis Shantae

La jugabilidad dentro de los distintos pueblos que nos encontraremos también cambia. Aquí el scroll lateral desaparecerá para dar paso a una especie de cámara en segunda persona situada detrás de Shantae. Pulsando hacia los lados iremos desplazando a la protagonista a lo largo del pueblo y pulsando B hablaremos con los personajes con los que nos topemos. Pulsando arriba en el stick (o en la cruceta) entraremos en las casas.

La forma de movernos por los pueblos es de lo más curiosa

A la cita tampoco faltarán impresionantes jefes finales que ocupan toda la pantalla (en su mayoría suelen ser batallas de lo más épicas), o subquests y tareas opcionales. Por ejemplo, si exploramos los escenarios concienzudamente podremos encontrar expansiones de vida (lo que en Zelda se conocería como Contenedor de Corazón), así como unos ítems que, una vez coleccionados los suficientes nos permitirán viajar entre pueblo y pueblo (la distancia entre uno y otro es considerable, ya que el mapa es bastante grande, con lo cual es algo que obviamente compensa). Pero no siempre será sencillo acceder a estos secretos. La mayor parte de las veces tendremos que ser poseedores de una determinada habilidad para poder alcanzarlos, por lo que no siempre será obvio.

Y por supuesto, no podemos olvidarnos de las tiendas, las cuales dotan al título de un suave pero adecuado componente RPG. Podremos comprar pociones para usarlas por el camino, magias para atacar a los enemigos (de uso limitado) e incluso habilidades de combate permanentes para Shantae, aunque estas últimas suelen ser bastante caras y requerirá recolectar bastantes gemas. Habrá que ser muy ahorrador para adquirirlas.

Por la noche los enemigos son mucho más poderosos, así que... ¡Cuidado!

Otro aspecto muy interesante de la jugabilidad es el curioso ciclo de día/noche que parece haber sido tomado directamente de Castlevania II: Simon's Quest (aunque mejor adaptado y menos injusto). Cada cierto número de minutos, mientras estemos correteando por el mundo se pondrá o saldrá el sol. Siempre será mucho más cómodo explorar durante el día, ya que de noche los enemigos se vuelven brutalmente duros.

Como ya hemos mencionado, la aventura se compone de cuatro amplias mazmorras cargadas de secretos, llaves, puzles, enemigos y puertas (al más puro estilo Zelda pero en scroll lateral), tras las cuales podremos enfrentar el final del juego. Al conjunto se suman algún que otro minijuego opcional que da vidilla y más variedad al título. Estos minijuegos son útiles para ganar gemas, así que se recomienda practicarlos.