Retroinformática: 10 juegos que disparan nuestra nostalgia

Manic Miner (Spectrum, Amstrad, C64, MSX)

Con su mítico título con letras móviles de colores, supuso un verdadero hito para el género de las plataformas. Matthew Smith, su programador, concibió el juego como las aventuras de un minero a lo largo de veinte cavernas donde nos encontraremos con los enemigos más extraños.

Aparecieron en una sola pantalla plataformas móviles, de las que se caen al tocarlas, y una ambientación propia para cada fase. Retos calculados al milímetro donde somos nosotros contra el desafiante entorno, incluso tenemos un tiempo límite en forma de contador de oxígeno.

Pirates! (Amstrad, C64)

Eres un pirata en el Caribe cuyo objetivo es retirarse rico, reconocido y casado. Para ello debemos lanzarnos a la mar a la aventura, recorriendo la aguas de diferentes países, pudiendo encontrarnos barcos a los que asaltar y cargarnos de riquezas, pero también peligros que podrían hundir nuestras aspiraciones.

Su desarrollo, combinando el control por menús con las maniobras del barco, fue algo totalmente novedoso en la época. La gestión de la tripulación, debiendo repartir riquezas y cada cierto tiempo buscar nuevos integrantes fue de una enorme influencia para este tipo de juegos en el futuro.

The Great Escape (Spectrum, Amstrad, C64)

Una obra maestra de 1986, que muestra de nuevo de lo que eran capaces aquellos programadores en 48K. Pese a no contar con licencia, está basado en la película con el mismo nombre, y nos pondrá en la piel de un prisionero de una campo de concentración alemán sometido a todas las penalidades de un lugar como éste.

Lo que lo convierte en único es que podremos saltarnos esas rutinas para hacer, lo que queramos, curiosear, esconder objetos, planificar la huida… podremos robar un uniforme alemán para pasar desapercibidos, o ocultarnos en los lugares más creativos. La meta, escapar sin que los alemanes acaben con nuestra moral, terminando atrapado para siempre en la terrible vida privado de libertad.

Bruce Lee (Spectrum, Amstrad, C64, MSX)

Nada menos que en 1984 aparecía por primera vez esta joya de la mítica U.S. Gold, en una época en la que existía una gran moda con las técnicas de lucha orientales. Así aparecía Bruce Lee a lo largo de veinte pantallas en las que debíamos recoger todos los farolillos.

Eso si logramos defendernos de los ataques de un ninja y un luchador de sumo que nos perseguirán allá donde vayamos, pero disponemos de nuestro puño y patada para defendernos y conseguir abrirnos camino hasta el enemigo final, en una gran combinación de géneros.

Turrican (Spectrum, Amstrad, C64)

Un título que hoy sería calificado como “metroidvania”, con laberínticos niveles, alejadas plataformas y oscuros enemigos a los que tendremos que disparar. Su scroll multidireccional y su impactante banda sonora dejó alucinados a los poseedores de los míticos ordenadores de los noventa.

En este videojuego descubriremos un súper ordenador que decide acabar con la especie humana, para ello crea todo tipo de monstruos cibernéticos, el último de todos ellos, el más perfecto, adquiere conciencia propia y decide volverse contra su creador, el futuro de la humanidad está ahora en sus manos.

Gracias a Slobulus por la ayuda con la selección de los títulos incluidos en este artículo