Nuevas licencias: ¿sinónimo de éxito?

Personajes de lilcencias consagradas

¿La novedad vende?

La llegada de una nueva  licencia al mundo de los videojuegos siempre es bien recibida, sobre todo cuando detrás de ella se encuentra un estudio de renombre. Cada vez que se conoce el desarrollo de una nueva serie los ánimos se caldean, las noticias llueven con información y la gente desea saber hasta el más ínfimo detalle. La falta de variedad se ha convertido con el paso de las generaciones en algo cotidiano y ver algo reluciente entre tanto hollín siempre es agradable. Nos emocionamos sobremanera cada vez que somos testigos de este hecho, cada vez más insólito. Son tantas las ganas que tenemos de echarle el guante a algo nuevo y original que, en ocasiones, no vemos si la calidad raya al nivel que exigimos o si es tan fastuoso como realmente parece. ¿Es la novedad sinónimo de éxito inmediato?

Todo dependerá de la originalidad del producto y de quién esté detrás. El hecho de que una compañía, sea cual sea, lance al mercado un juego completamente nuevo no significa que estemos ante un bombazo. El hecho de que sea nuevo no implica que vaya a estar por encima de series ya establecidas y sigan manteniendo cierta calidad. Sí es cierto que ver algo nuevo entre tanto remake, remasterización o saga quemada hasta la saciedad es algo interesante, aunque luego se desinfle por el camino. No obstante, no todas las novedades se quedan a medias, algunas obras entran con tanta fuerza que consiguen establecerse y sientan unas bases para futuras entregas. Es más, algunas sagas no empiezan tan bien como se esperaba; sin embargo, el paso del tiempo y el boca a boca hacen milagros y aumentan el interés de la comunidad.

Splatoon, para Wii U, demuestra que sí

La información entre jugadores es un concepto que nunca debe olvidarse, por el bien del juego en cuestión. Una novedad necesita por todos los medios publicitarse de tal forma que consiga generar el suficiente “Hype” para que los jugadores hablen de él constantemente. Con este trabajo ya hecho, solo queda esperar que los jugadores respondan de la forma que las compañías esperan. La novedad no vende por castigo divino. Lo hace por: necesidad, por calidad o por ambas cosas al mismo tiempo. El éxito de un nuevo juego es imperativo, pues de ello depende que más empresas arriesguen a la hora de crear nuevas experiencias. El resultado es positivo para jugadores y compañías. Una nueva licencia es un aliciente para que otros se sumen al carro de la novedad. El futuro de la industria depende de nuevas consagraciones y no de viejas sagas que están con pie y medio en la tumba. ¿A quién beneficia esta situación?

Variedad para los jugadores

El primer sujeto que se beneficia del éxito inmediato o a corto plazo de un videojuego es, sin duda alguna, el usuario de toda la vida. Hartos de ver cómo viejas glorias intentan por todos los medios hacer ver que son novedad, que nos intentan hacer creer han evolucionado o que la inclusión de otros conceptos sirve para maquillar los años de explotación, ver que una compañía se arriesga con algo nuevo siempre es bien recibido. Entiéndase nuevo como algo que protagonizan personajes inéditos, no algo que inventa un género hasta ahora desconocido. Ese concepto de originalidad hace tiempo que se perdió, pero no las experiencias que pueden ofrecer nuevas historias, personajes, escenarios o incluso mecánicas jugables. Hay algunos ejemplos en la actualidad que, aunque no son una evolución per se, sí se les puede considerar como algo revolucionario, fresco u original.

Hay para elegir...

No se puede vivir generación tras generación con las mismas sagas de hace 20 años, o incluso más. Hay algunas obras emblemáticas que todavía mantienen todo su esplendor gracias a la gran comunidad de jugadores que tienen tras de sí o la fama merecidamente ganada con entregas de una calidad superlativa, pero estos cambiarán o se cansarán en un momento dado. La falta de nuevas licencias es un tema preocupante. ¿Dónde ha quedado el talento de los desarrolladores a la hora de sorprender? ¿Ya no queda imaginación para crear títulos que nos transporten a experiencias? Sí queda, pero es más fácil tirar de remasterizaciones o remakes… Trabajar sobre algo ya existente no representa ningún esfuerzo y la gente no se gasta su dinero en algo que ha tenido la ocasión de jugar no hace mucho tiempo.

Crédito para las empresas

El lanzamiento de una nueva licencia no solo es bueno para el usuario, también lo es para la compañía que está detrás de su creación. Desde hace años, ciertas empresas se han apoltronado en el sillón de tal manera que apenas arriesgas un ápice en sus creaciones. Son los estudios pequeños, indies o aquellos que no temen al riesgo los encargados de crear nuevas experiencias jugables o argumentales. Muy de moda se han puesto los juegos indies en los últimos años, juegos que nos recuerdan tiempos mejores y que han logrado ganarse un juego entre los jugadores. 'Shovel Knight', 'Undertale' o 'Steamworld', entre tantos otros, han puesto "la pica en Flandes" y conseguido levantar el ánimo de los jugadores. No obstante, ¿es esto lo que queremos en las plataformas actuales? ¿Hemos hecho una gran inversión para tirar de indies?

Si entra con fuerza, ¿qué genera?

Sin querer desprestigiar a los juegos indies (bien merecido se tienen la cuota de mercado que han logrado), un usuario busca en la actualidad juegos adaptados a las consolas actuales, valga la redundancia. ¿Nos gastamos 400 euros para jugar a títulos que no sacan rendimiento alguno a las nuevas tecnologías? No. ¿Son buenos esos títulos? Sí, pero buscamos novedades adaptadas al tiempo que corresponde en ese momento. Los juegos de 8-16 bits están bien y sirven para recordarnos momentos olvidados, pero no pasa de ahí por desgracia. Una gran empresa que apuesta por nuevas experiencias y se arriesga siempre es vista con buenos ojos por el público, sobre todo cuando el proyecto tiene una pinta excelente. Un ejemplo claro de esto en la actual generación bien podría ser 'Horizon Zero Dawn', -del estudio Guerrilla Games-, y cuyo destino es PlayStation 4.

Repercusión en el mercado

Suponiendo que un proyecto inédito sea un éxito inmediato o a medio plazo, ¿qué impacto tiene en el mercado del videojuego? Un nuevo título no solo llama la atención del poseedor de la plataforma o plataformas de destino, también genera una potente atracción a aquellos jugadores que no tienen  X consola o todavía no han dado el salto a la generación actual. ¿Puede un juego suponer la compra de una consola? Dependerá de cada persona la respuesta claro, ahí lo dejamos. Sabéis que siempre gustamos de vuestras opiniones. Puede ser un desencadenante para, acto seguido, profundizar aún más en el catálogo de pasado, presente y futuro de una plataforma. Un juego nuevo puede servir de nexo para muchas cosas: aumentar las ventas de una consola (sobre todo si es exclusivo) o varias, dar a conocer el catálogo de una en concreto o ayudar a una empresa en su dura batalla por la supervivencia.

Horizon Zero Dawn, de Guerrilla Games

Las compañías dependen de muchos factores, tanto internos como externos, para que su nueva licencia “impacte” como es debido. Desarrollo, capital, marketing y situación del mercado influyen sobremanera en un proyecto de nuevo cuño. Y es que no todo nuevo título, por muy bueno que sea, consigue asentarse como es debido. Pese a las grandes bondades que pueda predicar un título, la comunidad de jugadores es la que decide el éxito de este. A lo largo de los años hemos visto como grandes juegos han pasado sin pena ni gloria, quedando relegado al cajón de “juego de culto”. Cuántas maravillas habrá en ese cajón figurado y cuántas empresas habrán hincado la rodilla por ello. A nivel personal, y seguro que alguno está de acuerdo conmigo, es una auténtica lástima ver que esos juegos no han tenido la oportunidad de despuntar. Ejemplos de ello, a montones y es una pena

Ejemplos de nuevas licencias

Ejemplos de nuevas y exitosas licencias en los últimos años hay unas cuantas. Bien por su puesta escena argumental o jugable, las diferentes consolas han podido disfrutar de títulos muy llamativos y populares entre los jugadores. Son unos simples ejemplos. Por supuesto, os conmino a que ofrezcáis también algunos:

No me gustaría dejar este texto sin hacer una reflexión y, de paso, invitaros a uniros a ella. Por muy exitoso que sea un juego, eso no significa que se deba explotar hasta la saciedad. Hay que ser lo más comedido posible a la hora de tratar con una nueva franquicia y saber ver cuándo se acaba su magia. Hay series que siguen vigentes desde hace años y se les nota el desgaste con cada entrega. La novedad puede convertirse en rutina en un abrir y cerrar de ojos.