El Contraanálisis... Soul Calibur IV

La Torre de Almas Perdidas es otro modo de juego para un jugador que ofrece la oportunidad de ascender o descender por la torre, a base de distintos desafíos de enfrentamiento en el camino. Si subes la Torre, cada fase se compone de una serie de plantas donde habrá que luchar con varios oponentes. El cumplimiento de determinadas condiciones, se recompensa con objetos desbloqueados para utilizar en el modo Creación y te permitirán seguir avanzando por la Torre.

Descender la Torre es un tema diferente. Puedes seleccionar dos personajes al comienzo con los que tendrás que enfrentarte a los distintos enemigos que te aguardan en cada planta. Cada bloque tiene un grupo de enemigos a los que vencer e irás recibiendo nuevos objetos valiosos tras superar un número de pisos.

Contraanálisis

Quizás sea, junto al modo online, la parte más atractiva del juego. No por los combates en sí ni por contar con especiales características, sino por la necesidad de superar los retos que marca para poder ir ascendiendo o descendiendo por la misma.

El nivel de inteligencia artificial de los personajes está bien desarrollado, y se han controlado algunas situaciones como el penalizar la inactividad de nuestro personaje si permanecemos constantemente a la defensiva.

Para los más puritanos, la Torre de Almas es la sustituta natural de Maestro de Armas de la versión anterior. En lo bueno, es un modo más sencillo y que ofrece más combates puros; en el lado contrario, pierde fuerza la profundidad de la historia, no hay estrategia.

El sistema de control es el mismo de entregas anteriores, con tres tipos de ataque y un botón de defensa. En esta ocasión, sin embargo, se incluye la posibilidad de romper la armadura de nuestro rival, lanzar ataques finales y, sin controlamos a los dos personajes de Star Wars (El Aprendiz y Dark Vader), utilizar el poder de la fuerza. Para esto contamos con nuevos indicadores: la gema que nos indica nuestro “alma”, una barra vertical que se encarga de mostrar la resistencia de la armadura y un medidor de Fuerza”.

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La innumerable variedad de movimientos que se pueden ejecutar en Soul Calibur IV es, sin duda, una de sus mayores cualidades. Quizás eso permite convertir el juego, que tiene un duración muy breve, en algo interminable.

La necesidad de alcanzar un determinado punto del combate (romper la armadura del enemigo en su totalidad y deshacer su defensa) para poder ejecutar los Finales Críticos, añaden un punto más de dificultad y reto al juego.

La anecdótica pero comercial incursión de los personajes de Star Wars dentro de la saga, puede interpretarse como un guiño a las críticas recibidas en entregas anteriores a la hora de juzgar la elección de personajes que han compuesto el juego. Algo así como un “porque yo lo valgo”.

La auténtica novedad de Soul Calibur IV llega con el modo multijugador en línea, que es una primicia en la franquicia. Puedes jugar en cualquiera de los modos de enfrentamiento uno a uno, pudiendo incluso utilizar los personajes que hayas creado en el editor. Las pruebas que hemos realizado han corrido muy bien con ligeros momentos de desfase. Quizás pueda variar el resultado según la velocidad de conexión, pero lo que nosotros hemos jugado ha funcionado muy bien.

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Sin duda alguna, el modo online ha dotado a esta saga de la única merma que podía achacársele. Este modo ha sido perfectamente implementado dentro del juego y, de acuerdo con IGN, debemos decir que funciona muy muy bien. La cantidad de jugadores presentes a cualquier hora del día, garantizan disfrutar de la experiencia del combate online durante horas.

La clasificación de jugadores por experiencia y la aleatoriedad de los contrincantes son, seguramente, dos de los aspectos más valorados por sus seguidores.

Soul Calibur se ha incorporado a la opción online con nota, y con unos resultados de rendimiento y funcionamiento realmente excepcionales.