Análisis Army Corps of Hell

La enorme calavera con capa que controlamos estará siempre en pantalla dirigiendo a los goblins y flanqueada por estos, a medida que avancemos iremos encontrando nuevas calaveras y capas que aportaran mejoras de todo tipo, consiguiendo que nuestro ejercito sea cada vez mas poderoso. Como Señor del Inframundo contaremos también con la habilidad de resucitar a nuestros siervos si no hace mucho que estos han caído, la partida finalmente terminará cuando nuestro personaje muera o ya no podamos atacar.

El calor de la batalla

En la batalla controlaremos la cámara con el stick derecho y así la dirección de nuestro ataque, una vez tenemos a nuestro enemigo al alcance podemos utilizar R1 para lanzar a nuestros goblins y acabar con el, si queremos que nuestra horda de goblins entre en formación bastará con mantener pulsado L1 y los ataques serán aún más poderosos, para cambiar entre las distintas clases haremos uso de los botones cuadrado, triángulo y circulo, alternado así entre magos, lancero e infantería. También podremos realizar un desplazamiento rápido gracias al botón X, algo que nos ayudará a esquivar los fuertes ataques de los enemigos mas poderosos o de los jefes finales.

En cuanto a los controles táctiles han desaparecido por completo, esto es algo que algunos agradecerán y a otro molestará, pero lo cierto es que la respuesta de los botones a las ordenes funciona realmente bien. Como curiosidad el panel táctil trasero si tiene utilidad, podremos crear objetos mágicos gracias a la alquimia, tales como un tambor de resurrección, estos objetos podremos utilizarlos cuando sea necesario en la batalla, al activarlos comenzará un minijuego, de tambores en este caso en el que debemos marcar el ritmo a base de golpes en la zona posterior de nuestra PS Vita, algo que está implementado con bastante originalidad.

El combate se realiza en una serie de escenarios, por lo general bastante vacíos en cuanto a nivel de detalle, en los que nos enfrentaremos a los distintos enemigos que puedan surgir y una vez acabemos con ellos tendremos acceso al siguiente y así sucesivamente hasta el jefe final. En ocasiones encontraremos unas pequeñas jaulas de goblins, con ellas podremos traer de vuelta a nuevos siervos si los hemos perdido durante la batalla, algo que pasará a menudo, para esto haremos uso de unas gemas de color rojo que los enemigos dejarán caer cuando les venzamos.

Por desgracia el título se vuelve bastante repetitivo después de terminar las 15 primeras fases, los enfrentamientos serán siempre en salas cuadradas y cada 3 fases un jefe final. Los enemigos tampoco ayudan a mejorar esta situación pues siempre encontraremos a los mismos 4 enemigos, cambiando únicamente el color, su poder de ataque y su tamaño, según acabemos con ellos podremos consultar sus propiedades en el bestiario pudiendo así conocer la mejor forma de acabar con ellos, o los objetos que pueden soltar cada uno de ellos. Los jefes finales cuentan con un diseño superior al resto y será necesario estudiar su ataque antes de lanzarnos a lo loco, pues podemos quedarnos sin goblins rápidamente, lo malo llega cuando se repiten los jefes finales pues sus ataques no varían lo mas mínimo y podremos utilizar siempre la misma estrategia.