Pre-Análisis Soul Sacrifice

Desde que se anunciara hace justo un año, 'Soul Sacrifice' ha recibido un seguimiento exhaustivo por parte de los medios especializados y de los propios jugadores. ¿Se merece realmente esta atención o ha sido fruto de la alarmante sequía de juegos que sufre PS Vita? Esto no lo sabremos hasta el 30 de mayo, día escogido para su debut en tiendas americanas y europeas.

'Soul Sacrifice' ha sido comparado en numerosas ocasiones con la saga 'Monster Hunter'. Si bien es cierto que han sido abundantes los clones en los últimos años, a estas alturas, habiendo visto tanto del juego ya, es difícil seguir manteniendo este símil. El juego de Sony tiene personalidad propia y, en realidad, pocas semejanzas con la franquicia de Capcom. Ambos son action-RPG, pero sus direcciones son muy distintas. Este sambenito que se le colgó fue más culpa de la propia desarrolladora que otra cosa. Durante los primeros meses, el secretismo alrededor del título fue alarmante, con tráilers que decían poca cosa y mucha rumorología sobre su estilo de juego.

Pronto conoceríamos que detrás de 'Soul Sacrifice' estaba el mítico creador de 'Mega Man', el japonés Keiji Inafune (embarcado en mil proyectos a la vez, sea dicho de paso). Junto a Marvelous AQL, estaba dando vida a un juego de acción que "hará temblar el alma".

La banda sonora corre a cargo de Yasunori Mitsuda y Wataru Hokoyama, y se grabó en el estudio Skywalker Sound en Marin County (California), cuyos ingenieros de sonido se encuentran entre los mejores del mundo. Mitsuda explica que componer los temas del juego fue su desafío particular, ya que se concentró en añadir muchos elementos diferentes en cada pieza, de manera que la melodía final fuese emocionante de por sí, con altos y bajos como la propia situación del jugador, que por momentos se encontrará tomando la delantera, mientras que en otros se verá ante una clara desventaja.

El sacrificio en su grado máximo

El protagonista de 'Soul Sacrifice' fue criado por un despiadado brujo, que decide sacrificarlo como ofrenda a los demonios del averno. Justo en ese momento, nuestro héroe es transportado a un nuevo mundo de magia, gore y sangre, donde bajo una maldición deberá utilizar los nuevos poderes que le han sido otorgados para sobrevivir a los peligros y enemigos que le esperan en su aventura.

Lo crudo de dichos poderes es que requieren sacrificar partes del cuerpo para ser conjurados. Por ejemplo, arrancarse la espina dorsal para usarla como espada (Excalibur), amputarse los dedos de la mano y usar los huesos como cuchillas (Gleipnir), sacarse los ojos (Gorgon) o ser atravesado por sus propios huesos, nervios y tendones para clavárselos a las bestias cercanas (Gungnir). Así pues, no existe un sistema convencional de magia, sino que cuanto más de nuestro cuerpo sacrifiquemos, mayor poder estaremos obteniendo en el ataque. Ya que la variedad es extensa, se puede asignar un conjuro a cada botón: triángulo, cuadrado, círculo, y cambiar a una segunda paleta con R.

Hay además un modo multijugador que promete alargar todavía más la duración del título. Juntándonos con hasta otros tres jugadores, formaremos equipos para enfrentarnos a grandes peligros. Pero cuidado, que el componente cooperativo se corta en cuanto uno de los miembros decide sacrificar al compañero para adquirir nuevos y más devastadores poderes. Este modo se podrá jugar online o ad-hoc, el primero con chat de voz.