Shenmue III y el Kickstarter: ¿Está Sony jugando limpio?

Cuando en el año 2001 nos pasamos 'Shenmue II', dejándonos de nuevo con la boca abierta, ya se podían ver las dificultades que habría para llegar a vislumbrar la tercera parte. Sin embargo, desde luego nadie podía imaginar que se tardaría tanto y, sobre todo, la forma en que será creado. Y es que en este mundillo nunca se puede decir que ya lo has visto todo, resulta sorprendente descubrir que uno de los juegos clave del E3 de Sony y del que no se dejará de hablar hasta su lanzamiento, recurrirá a la financiación colectiva en Kickstarter para conseguir fondos.

Aunque está claro que el juego, en su mayor parte, tendrá que ser financiado por empresas (recordemos que la primera parte costó 47 millones de dólares y en Kickstarter aseguran que 10 millones es la cantidad ideal), llama la atención que uno de los retornos más esperados de la historia vuelva de esta forma.

Hasta ahora Shenmue era casi un concepto maldito

¿Quieres que un gamer se ponga nostálgico y triste? Hasta ahora bastaba con decir una palabra, 'Shenmue', más aun si eres fan de Sega, empresa financiadora de sus dos primeras partes. Nos recuerda la historia de un gran videojuego "encerrado" en una consola que, injustamente, se fue a pique prematuramente. Por ello cuando en la conferencia de Sony se pudo leer 'Shenmue III' la gran espina clavada en el colectivo gamer comenzaba a retirarse.

'Shenmue' fue un enorme impacto en su día, un juego creado con verdadera obsesión por el detalle, en donde conocíamos personajes profundos, muy coherentes, que nos hacen sumergirnos de cabeza en su historia. No podemos hacer un viaje sin dinero, para tener dinero hay que trabajar, el trabajo será algo duro… la vida de Ryo no es fácil, mientras el jugador alucinaba tras la pantalla con algo nunca visto.

La espera podría ser insoportable

Hemos esperado tanto por un nuevo 'Shenmue' que más de uno no terminará de creérselo hasta que lo tenga en sus manos. Y lo cierto es que aún tendremos que esperar para jugarlo. En principio está previsto para finales de 2017, pero no está confirmado, de hecho, si se consigue toda la financiación necesaria, el señor Suzuki tiene previsto crear un videojuego "de mundo abierto real", de lo que se puede deducir que tendrá un desarrollo muy largo.

Ésta es, sin duda, una de las grandes contras de un Kickstarter en un videojuego como éste. De acuerdo, sabemos que está llegando, pero para lanzar la campaña Kickstarter hay que anunciar el proyecto sin tener prácticamente nada hecho. Esto deja poco margen para un más que posible retraso, convertirse de nuevo en "el juego que nunca llega", por si no existiera ya suficiente presión para su desarrollo.

Hasta ahora el proceso lógico para semejante bombazo era tener algo avanzado que mostrar, y un margen de tiempo razonable, y es que con los desarrollos de hoy en día hay que cuidar este aspecto, no hablamos de un juego indie de 9 meses de gestación. La espera por 'Shenmue III' puede llegar a convertirse en toda una cruz para los fans, especialmente en estos tiempos de poca paciencia. Hablamos de un juego que estará aquí en dos-tres años, mucho tiempo en el ocio electrónico, pero así es al hacerlo mediante Kickstarter.

¿Dónde va el dinero?

Yu Suzuki ha aclarado que ni Sony ni Shibuya Productions ven un duro del dinero que sale de los mecenas Kickstarter, todo va la empresa responsable del videojuego, YS Net, su compañía. La verdad es que sería una tomadura de pelo que una gigante como Sony se estuviese lucrando de un Kickstarter, pero afortunadamente ya se ha aclarado que no es así.

Por encima de todo, tendemos a pensar que, si esta era la única forma de que 'Shenmue III' se hiciera realidad, adelante… Pero ¿el fin justifica los medios? Desde luego tienen todo el derecho a plantearlo así, y lo cierto es que los fans han respondido de forma positiva, pero espero que estemos ante un caso aislado.

La financiación en Kickstarter está destinada a pequeñas empresas (o inexistentes al principio) con una gran idea, al menos esa era su función. Corporaciones que no tienen una multinacional detrás que les permita llevar a cabo su proyecto. Esto choca frontalmente con palabras como 'Shenmue III' o 'Sony'.

Se intuye que las grandes empresas tenían muchos temores respecto a la tercera parte de un videojuego que, en su día, ya le causó serios problemas económicos a otra editora como SEGA. Un Kickstarter que bate récords en su estreno parece un modo de aprobar el proyecto en una junta de accionistas: "No se preocupen por 'Shenmue III', la gente ha pagado cuando el juego no está ni empezado, imagínense cuando salga a la venta".

Esto multiplica el mérito de SEGA, que en su día financió dos entregas sin pedir ayuda a nadie... Es cierto, la cosa no salió bien, pero con un juego de esta calidad, lo lógico es que hoy SEGA se hubiese convertido en el principal fabricante de consolas. Para ganar hay que arriesgar (por desgracia a SEGA le tocó perder), pero parece que ya no quedan empresas dispuestas a asumir ciertos riesgos en pro de conseguir lo mejor: ¿amor por el ocio electrónico? No, ya sólo vale que el clin-clin en la caja esté asegurado al 100%.

PS4 Vs. ¿Dreamcast?

Personalmente no me gusta que un juego como éste dependa de la financiación colectiva, por mucho que se asegure que se cumpliran los objetivos. Suzuki ha dicho que recaude el dinero que recaude, será un título a la altura, aunque es posible que no pueda incluir todo lo que tenía pensado…

Esto resulta chocante: Si llegamos a esta cifra -> Traducción al español. Si superamos los diez millones -> Tendremos un mundo abierto… Estamos hablando de un juego con una legión de seguidores, y considero que no deberíamos empezar hablando de lo que puede ser, sino de lo que realmente será.

No entiendo el miedo a que se repita lo ocurrido hace 15 años, ¿realmente podemos comparar el caso de la exitosa Playstation 4, con la incomprendida Dreamcast? Los costes de desarrollo se multiplican hoy, de acuerdo, pero estamos hablando de un título que ha recaudado ya más de tres millones de dólares, cuando los usuarios saben que no lo catarán hasta finales de 2017 o quizá 2018. La apuesta no podría ser más segura.

Ryo, en la epopeya más épica

Rescatar a Ryo de las sombras no ha podido ocurrir de un modo más retorcido, desde la desarrolladora han jugado con el entusiasmo de los gamers y éstos, como siempre, han respondido. Ahora sólo queda que todo lo demás esté a la altura.

El despliegue ya está montado, adelante con ello, ojalá salga bien, sobre todo por la salud mental de todos. Esperemos que en su largo tiempo de desarrollo Sony no se eche atrás en la financiación de un título que ha anunciado a bombo y platillo, y que le ha servido para firmar una conferencia histórica en el reciente E3 2015.

Tras anunciarlo como uno de sus caballos de batalla sería extraño que hubiese problema pero ¿y si nos salen con que la campaña en Kickstarter no ha obtenido los diez millones de los que hablan? Espero que no caigan en la torpeza de recortar nada, y que veamos ese 'Shenmue' de verdadero mundo abierto del que ya nos han hablado. Especialmente si resulta ser un exclusivo de Playstation 4 en consolas, Sony debería asegurarse de que al equipo de Yu Suzuki no le falte ni un centavo, y no dejar esto sólo en las manos de los jugadores que han puesto dinero, aun sabiendo que había detrás un importante editor.

Espero que el caso 'Shenmue' sea el primero y el último de una "superproducción" con grandes empresas detrás, anunciada a bombo y platillo, que tiene que recurrir a la financiación colectiva. Esto supone un desarrollo muy largo y unas "amenazas de recorte" en las características del juego (en caso de no obtener los ingresos colectivos establecidos por ellos) que es totalmente injusta para el jugador, que bastante tiene ya con desembolsar los caros precios de lanzamiento de los videojuegos y los interminables parches cada vez más grandes. Sólo faltaba ahora tener que estar pendiente de si las grandes corporaciones obtienen la ayuda que "necesitan" para sus productos... Choca directamente con la idea original de Kickstarter o de las empresas que realmente necesitan campañas de financiación colectiva.