Nuestro álbum de fotos sobre la Gamescom 2012

Vamos a jugar a más títulos

Al siguiente día damos un nuevo paseo por los Halls del lugar, encontramos más títulos de camino como Crysis 3, Rayman Legends, Zombie U, Injustice,... Y al mismo tiempo nos quedamos boquiabiertos con las bellezas de cada stand a cada cual más perfecta, ya veréis más adelanta, ya...

La misteriosa figura del niño

En nuestra estancia en el hotel nos encontramos con una particular figura que adorna uno de los baños principales. Esa maldita figura de un niño de cerámica nos ha dado más de un susto mientras trabajábamos en la sección donde teníamos mejor señal de Wifi. 

Al tener problemas de luz justo en la parte donde se encontraba dicha figura, la primera vez que nos lo encontramos fue un tremendo susto, como aquellos videojuegos que aparece el monstruo de repente, solo nos faltaba el ruido para acongojarnos un poco más.

¿Qué misterio esconde este niño?¿Y porque demonios mantiene un orinal en una mano? ¡Como vamos a hacer nuestras necesidades delante del niño! A mi me recordaba en aquellos puzles de Residen Evil, que tienes que dejar una cosa pesada (no penséis mal) para que se descubra una llave escondida en algunas de las paredes.

Nuevas presentaciones

Volvemos al Hotel donde se encuentra Sony, ese mismo día descubrimos Wonderbook y jugamos un poco con el. También el mismo día conocemos Beyond: Two Souls y al propio David Cage de Quantic Dream, un hombre la mar de agradable y con el que compartimos un poco de charla. Finalmente le acabo diciendo lo que me encanto Heavy Rain y me contesta "Pues ya veras con Beyond". Volvemos a la Gamescom para seguir probando algunos títulos y que narices, para ver más azafatas.

¿Donde cenamos?

Nuestra estancia en Colonia nos hace tener que buscar un lugar donde cenar, vamos andando hasta acabar con los pies llenos de ampollas (la plantilla de mi compañero David es un crimen, que mal lo paso el pobre). Descubrimos lugares como Subway, turcos (allí se lleva mucho por lo visto), pizzerias y otros lugares con comida un tanto extraña. Finalmente vamos por lo fácil, un cartel del McDonalds y a buscar el lugar.

Como David no podía caminar (teníais que ver sus pies), fui yo solo a preguntar por la calle donde estaba exactamente situado el maldito McDonalds, que si lo llego a saber ni se me pasa por la cabeza. Después de andar una burrada de kilómetros, llegó al Hotel y me encuentro que David no se encuentra en la habitación, ni dentro, ni fuera, no me recoge las llamadas y encima no hay rastro ni de que se encuentre en la habitación. Vaya preocupación, pensaba que lo habían raptado o le había pasado algo. Minutos más tarde descubro que el cansancio le había casi literalmente matado, y se encontraba completamente anestesiado en la cama sin ni tan siquiera oir mis brutales golpes en la puerta del hotel. ¡Vaya susto David, vaya susto!.