Análisis Lara Croft and the Guardian of Light

¿Un Tomb Raider que no se llama Tomb Raider?

Sin ser un argumento de sobresaliente, esta vez nos encontramos a nuestro heroína en la búsqueda de un antiguo espejo en un templo de Sudamérica, el llamado "Espejo del Humo". Como Lara es un culo inquieto, decide adentrarse en la búsqueda de esta artefacto y como en todas sus aventuras, unos mercenarios la persiguen y consiguen dar con más facilidad al Espejo arruinando por completo su buen trabajo realizado. No podría faltar el tópico en el que los Mercenarios liberan del espejo del humo, un poderoso demonio de nombre Xólot que acaba con todos los mercenarios excepto con Lara, por suerte de la arqueóloga, esta vez no estará sola, y junto con Xólot también resucita un nuevo personaje en la saga, Totec, el Guardián de la Luz, que ayudará a Lara a detener de una vez por todas a este poderoso demonio que pretende destruir el mundo.

Como podéis ver, es la típica historia con un malo que desea destruir el mundo, la excusa perfecta para meter en un nuevo lio a Lara Croft, no hay mucha originalidad en su desarrollo, pero para ser un juego arcade no hace falta más que enemigos a tutiplén, algunos jefes finales y diferentes fases de plataforma para completar a su medida un juego de estas características. El potencial de esta entrega descargable, cae su peso principalmente en el modo cooperativo y competitivo gracias a Totec, el ayudante de Lara Croft, que tanto uno como otro se necesitaran para ayudarse a subir diferentes salientes, encontrar la salida a complicados laberintos y conseguir las diferentes recompensas que encontraremos a lo largo de las 14 fases en las que se divide El Guardián de la Luz.

El desarrollo central es principalmente el de ir por diferentes pasillos eliminando a todo bicho viviente mientras resolvemos la solución de diferentes puzles, desafíos y trampas para llegar hasta la batalla final con Xóloc, no sin antes acabar con varios jefes finales, ayudar a nuestro compañero a alcanzar todo tipo de plataformas y discurrir como pasar ese puente sin pisar el botón que hace que se derrumbe todo a nuestro paso, si leéis entre líneas, esto es principalmente por lo que le hace repetitivo a Lara Croft y el Guardián de la Luz, aunque el cooperativo ayuda (y con creces) el hecho de realizar una vez lo mismo una tras otra con misiones que se parecen mucho a la anterior, es lo que consigue que acabemos aburriéndonos con alguna de las fases intermedias de las 14 en la que transcurre la aventura.

Es un juego arcade, y como tal no pararéis de ver un numero bastante alto de enemigos atosigando y algún que otro puzle para al menos darnos un respiro en cuanto a lo que se refiere la acción, por eso si no sois de aventuras pero si de los Tomb Raider, Crystal Dynamics ha pensado especialmente en ambas partes, porque literalmente la esencia de las últimas entregas ha sido plasmada en este nuevo descargable isométrico, ya que no faltaran las plataformas lugares en donde debemos utilizar nuestro gancho para colgarnos, saltos que pueden estar mal logrados y dar una agónica muerte de alturas a nuestra protagonista, las doble pistolas que desenfunda Lara Croft para eliminar a los enemigos y que cargará y rodará en el suelo en el momento que se la agote las balas y otras pequeñas características que muchos recordaran de anteriores entregas, es decir, tenemos los diferentes tópicos de los videojuegos arcade en donde el stick izquierdo movemos al protagonista y con el derecho apuntamos en 360º, y para los más nostálgicos tenemos las pinceladas de la saga Tomb Raider, tanto para uno como para otros, tenéis vuestra fórmula perfecta para engancharos desde la primera partida.

A falta de una historia mejor trabajada y la implicación de cinemáticas -a veces insulsas- para "pegar" un nivel con otro, Lara Croft y El Guardián de la Luz cuenta con niveles dignas de las entregas originales, lo que ofrece al usuario que no se quede en un simple arcade descargable y ofrezca todo tipo de sensaciones a la hora de recordar aquellos juegos de aventura que ofreció en su momento Eidos, Core o los propios Crystal Dynamics, no faltaran gigantescas piedras que nos persiguen por un pasillo estrecho, gigantesco jefes finales que ponen en dicho nuestras habilidades con el mando y trampas que pondrán en juego nuestro cerebro, un auténtico Tomb Raider con otro tipo de perspectiva.

Lara Croft y el Guardián de la Luz

Es extraño que después de 10 entregas nadie haya pensado en dar un compañero o un modo multijugador a Lara Croft, sabemos perfectamente que la popularidad de Lara Croft en sus mejores tiempos no hizo que Core Desing pensara en un mejor futuro para los Tomb Raider y no dieran con una revolución del mismo, pero desde luego que Crystal Dynamics ha encontrado la fórmula perfecta para dar otro giro a la saga utilizando el modo cooperativo que tantas buenas horas nos va a dar principalmente para terminarnos la aventura. Para que el cooperativo haga bien su trabajo, Lara Croft y Totec contaran con sus respectivas armas, que dependerán de quien las maneje si jugamos solos o de manera cooperativa, en el caso de Totec, el Guardián de la Luz, este nuevo personaje tiene entre sus manos un escudo que le ayudara a protegerse de cualquier amenaza y una lanza que le permitirá tanto atacar como crear plataformas donde tanto Lara como él puedan subirse para alcanzar salientes más elevados, mientras que nuestra principal protagonista, más acorde con la tecnología actual, tiene minas ilimitadas, diferentes armas de fuego y un gancho que le permite tanto a ella como a su nuevo compañero balancearse y llegar hasta las diferentes plataformas del videojuego.