La alianza SEGA - Sony que pudo cambiar la historia del videojuego... y que SEGA Japón echó abajo

Sega y PlayStation

En la actualidad, los videojuegos, las plataformas en las que jugamos y, sobre todo, las que podemos tener, nos abren un importante abanico de opciones. Ajustándose a nuestras necesidades o, simplemente, permitiendo que echemos un vistazo a los juegos clásicos con la retrocompatibilidad, nos ofrecen todo tipo de opciones interesantes. Pero esto podría haber sido muy diferente si el trato hubiese salido como estaba planeado.

En su día, supimos que Nintendo y PlayStation habían buscado la forma de unirse, de crear una consola única de la que sí tuvimos un prototipo conocido como Nintendo PlayStation. A pesar de ello, el trato no salió como se esperaba y esto acabó desembocando en una rivalidad clara, un momento en el que ambas compañías competían con intención de conseguir la consola líder en el mercado. Y mientras que Nintendo mostró su interés por hacer tratos con Philips, Sony tanteó por otro camino hasta llegar a SEGA, su segunda e interesante opción.

Una opción B que, finalmente, no salió como esperaban

Tras el fracaso en los planes con Nintendo, directivos de PlayStation no dudaron en avanzar en su camino para superar a la compañía, buscando entonces proponer un buen trato a Tom Kalinske, por aquel entonces el CEO de SEGA of America, para trabajar en una consola juntos. Si bien el trato inicialmente parecía interesante e incluso se valoraba la idea de trabajar juntos, con aportaciones por parte de SEGA para encaminar la propuesta por el buen camino, todo se torció en un punto.

Sonic

Fue SEGA Japón la que rechazó la idea, evaluando esta propuesta como “algo estúpido”. De hecho, hay quienes indican que algunos de los puntos marcados por SEGA fueron utilizados posteriormente por PlayStation, al igual que esta sirvió de inspiración a Sony para enfocarse en el 3D y dejar atrás su apuesta por el 2D. Sin duda, un cambio que muchos jugadores agradecieron positivamente.

De este trato haber salido bien, muchas cosas podrían haber cambiado, incluso para la propia SEGA, quien no tuvo el éxito esperado en el mundo de las consolas. Pero lo que ahora nos provoca esta idea es si aquella broma de la propia SEGA a Sony para anunciar su consola pudo ser como una respuesta a este trato que, lamentablemente, no llegó a nada.