[Impresiones jugables] Ryse: Son of Rome

La mecánica es bien sencilla, con un botón asestaremos un golpe con el escudo, mientras que con otro nos protegeremos. Por supuesto utilizaremos nuestra fiel espada Gladius y que tanb usada era en la época. De nada servirá aporrear los botones sin más durante un enfrentamiento con varios enemigos. La resistencia del personaje no es que sea muy alta, por lo que en menos que canta un gallo podremos estar muertos si no nos andamos con cuidado.

Los objetivos a cumplir durante la misión eran los vistos en multitud de títulos de acción: defender posiciones, eliminar a ciertos enemigos que se encuentran en determinadas zonas. Nada nuevo bajo el sol, pero que debido a la magnífica y soberbia ambientación de 'Ryse: Son of Rome' hace que todo nos parezca ligeramente más llamativo.

Así pues cuando nos encontramos con que debíamos abatir a una serie de enemigos situados en las torres, la mejor manera de echar abajo sus defensas era avanzar con nuestros romanos utilizando la formación tortuga. Con escudos en alto nos defendíamos las flechas, mientras que con las lanzas podríamos realizar alguna que otra baja entre sus filas. Otro de los objetivos consistía en  hacerse con las defensas de la fortaleza, algo que nos llevó mucho más tiempo debido al gran número de enemigos.

Una de las preguntas que muchos usuarios se hacían cuando se mostró el juego es si la presencia de QTE sería tan latente como en el gameplay de la conferencia de Microsoft. Tras probarlo podemos aseguraros que estos solo aparecen cuando llega el momento de ejecutar a un enemigo, y aún así tenemos la ocasión de no realizarlos y seguir de manera normal con el combate.

Pocos juegos como 'Ryse: Son of Roma' han recreado con tantísimo nivel de realismo y crudeza la antigua Roma, una ambientación que pocas veces ha sido jugosa para los estudios más allá de títulos de estrategia. El juego de Crytek es la excepción que confirma la regla y que viene a demostrar que la acción y la historia pueden ir de la mano sin problema alguno.

¿Será uno de los primeros juegos exclusivos de Xbox One que alcance la cota de joya? De momento es muy pronto para saberlo, ambición hay en el proyecto y la originalidad de meternos de lleno en la más cruda guerra de antaño hace que gane unos cuantos enteros. Más aún si sumamos un sistema de combate exigente pero gratificante al mismo tiempo. En los próximos meses sabremos si el auge de Roma llega también a la consola de Microsoft.