Pre-Análisis Final Fantasy XIII-2

Junto a este intento de regreso a los clásicos FF, se ha buscado un cambio gráfico y estilístico en los entornos, para hacerlo todo más dinámico y participativo. Los pueblos y ciudades habitados reaccionarán ante nuestra presencia, el entorno o incluso el clima, y podremos conversar como Dios manda con todos los personajes para extraer información importante. Sin embargo, aunque estos últimos apuntes suenan realmente bien, lo visto en la demo no ayuda a ser demasiado positivo, con conversaciones repetitivas, vanales e inservibles que casi podían haberse ahorrado. Crucemos los dedos y esperemos que en la versión final sea distinto.

Dejando ya los grandes cambios a un lado, otro detalle a tener en cuenta es que se premiará tener partidas guardadas de Final Fantasy XIII y que esta entrega contará con contenido descargable. Final Fantasy XIII iba a tenerlo, pero al final no se lanzó, algo que sí que harán en esta ocasión. Según comentaron en varias ocasiones los desarrolladores, el contenido descargable estará formado por trajes alternativos, nuevas armas o monstruos para coleccionar y usar en combate. Esos DLC también revelarán pequeños detalles de la trama, actualizarán varias áreas del juego y, en ocasiones, contendrán jefes finales que se podrán usar para enfrentarlos en un coliseo.

Ah, y ya para terminar, regresan los casinos y los minijuegos, incluidas las carreras de chocobos, además de que podremos guardar las partidas cuando queramos, en lugar de tener que usar puntos específicos destinados a tal fin.

En definitiva, da la sensación de que Final Fantasy XIII-2 ha sido concebido única y exclusivamente como redención por el lanzamiento tan criticado de la primera entrega. Aunque es acusado por muchos como un Final Fantasy XIII mejorado con DLC que nunca llegó a ver la luz, todo esto no tiene por qué ser malo si al final lo que acabamos teniendo entre las manos es el Final Fantasy que todos queremos. Sinceramente, esperemos que así sea, y lo descubriremos en Europa a partir del próximo 3 de febrero.