Driveclub

Una vez presentados sus progenitores y destacadas sus ganas de innovar e ir más allá es hora de ir a lo que a todos nos interesa, al juego. Lo primero es lo primero. Lejos de lo que pueda parecer hay que dejar claro que 'Driveclub' no es un simulador, aunque tampoco es un arcade alocado y salvaje como 'MotorStorm' claro está. El juego busca alcanzar un punto intermedio entre ambos tipos de jugabilidad siguiendo los pasos de franquicias como 'Project Gotham Racing' y de títulos como el reciente 'Forza Horizon'. Se trata de un híbrido. Gracias a ello se sitúa en la franja existente entre 'Gran Turismo', 'MotorStorm'/'WipEout' y 'LittleBigPlanet Karting'/'ModNation Racers', la única en la que podía convivir con dichas sagas sin que Sony se viera obligada a prescindir o ''pisar'' alguna de ellas.

La idea que hace de eje sobre el que gira 'Driveclub' es la de crear equipos o ''clubs'' con nuestros amigos y convertirlos en los mejores del mundo. El título está ideado por y para el juego competitivo. Según nos contaba Matt Southern (director de Evolution) la magia reside en que podremos compartir cada detalle y cada estadística que genere nuestra progresión con el resto de usuarios. Permaneceremos siempre conectados a la comunidad y podremos unirnos a nuestros amigos cuando queramos (siempre y cuando ellos lo permitan) para hacer cosas tales como sustituirles en mitad de la carrera, algo que puede ser más que aprovechable en eventos por etapas o en campeonatos. Toda carrera, toda prueba nos premiará con puntos para nuestro perfil y nuestro club en base a una serie de factores a determinar por el propio evento.

Si bien está pensado para brillar explotando las opciones online y sociales de PlayStation 4, seguirá siendo una apuesta interesante para aquellos que prefieran jugar en solitario al permitírsenos poder conseguir puntos para nuestro club y recompensas varias compitiendo únicamente contra la máquina, es decir, offline.