Análisis Deus Ex: Human Revolution - El eslabón perdido

Jugabilidad

Jugablemente, ¿qué decir a estas alturas que no sepamos de la fórmula de Deus Ex?

El control es idéntico al del juego en sí, con todas sus particularidades. Y las opciones a la hora de superar los escenarios son las mismas. Podemos hacer uso del sigilo o de la potencia de nuestras armas. Lo único que ha sido retirado del DLC han sido las opciones de diálogo.

No os confundáis, sigue habiendo, sólo que no tendrán ni papel ni peso durante el desarrollo, apenas podremos demostrar nuestra labia en un par de ocasiones, de las que saldremos siempre de la misma forma, elijamos lo que elijamos, cambiando sólo los diálogos que se nos muestran. Dicho elemento no ha sabido explotarse aquí.

Ésto no quita que sí que existan decisiones en el contenido que cambien el final del mismo.

Ésto puede ser considerado la lacra más importante del título. El no introducir nada nuevo.

Existen enemigos o un jefe final nuevo, por supuesto, pero, pasando por alto que el último no está a la altura de los mostrados en la aventura principal, los primeros no tienen variedad alguna. Ni los menús, ni los aumentos, ni las armas... TODO es exactamente igual.

Incluso el recurso de desarmarnos en un principio pierde sentido al entregársenos en la primera hora de juego nuestra armadura, silenciador para la pistola, granadas o una considerable cantidad de puntos praxis que sabremos perfectamente en qué gastar para completar sin problema alguno el contenido (pirateo, invisibilidad, doble derribo...)

Incluso podríamos decir que la dificultad se ha visto reducida en exceso. Encontraremos enemigos en grupos mucho más reducidos, claves para desactivar la seguridad por doquier... Existe mucha menos acción que la vivida en la aventura original.

Todo ésto no tiene porqué ser malo. El ser idéntico al juego que complementa es sinónimo de calidad, seguimos teniendo muchas opciones a la hora de progresar, muchos caminos a recorrer, elementos a explorar, referencias a personajes conocidos... etc.

Conclusión

"El eslabón perdido" es una buena oportunidad de disfrutar de la experiencia "Deus Ex" como se hicera en su día para todos aquellos que se quedaron con ganas de más tras acabar la historia principal. Pero eso sí, uno ha de estar dispuesto a afrontar el precio, o las carencias del DLC, que van desde no aportar nada a lo contemplado en el original, reducir la dificultad debido a los escenarios o eliminar las partes de diálogos hasta no saberse adaptar al juego, impidiendo importar e incluso exportar partidas a nuestro antojo, entre otros.

Si uno le sabe perdonar estas carencias disfrutará de principio a fin mientras dure dicha fase. Pero lo hará con la espinita de pensar lo que hubiera dado de sí una ciudad con todas las características de las que éstas mostraban en el juego original, con diferencias palpables en cuanto a armamento, mejoras u objetivos... más tras las continuas declaraciones acerca de las muchas que se descartaron para la versión final.

Un DLC digno del juego al que le pesa en exceso el dejar con ganas de más o transportar la inmensa variedad de situaciones del original a "5 horas".