The Legend of Zelda: A Link Between Worlds

Como los de antes, fusionado con conceptos modernos

Estamos ante un título que homenajea uno de los ‘Zeldas’ más queridos por los fans, hablamos de ‘The Legend of Zelda: A Link to the Past’, un título que nos maravilló a principios de los noventa.

Sólo hay que tener en cuenta, para ver ese homenaje, que la parte del mapeado de Hyrule está tomada del título original de Super Nintendo, pero ha renacido en un glorioso 3D. El uso y la calidad del 3D nos llamará la atención desde un primer momento.

Todavía no puedo situar el título dentro del catálogo de Nintendo 3DS ya que aún no lo he terminado, pero en cuanto al uso del 3D, estamos probablemente ante lo mejor de lo mejor, la perspectiva cenital contribuye a ello.

No cometas el error de jugar a ‘A Link Between Worlds’ con el 3D desactivado (salvo que me digas que tienes la Nintendo 2DS) te estarías perdiendo plataformas que vemos desde gran altura y a las que podemos calcular la trayectoria para llegar de una forma más natural, saltos de Link hacia nosotros, enemigos que al ser derrotados saltan en partes hacia nosotros… o un simple árbol que provoca un gran escorzo respecto al suelo.

La experiencia previa está llena de ingeniosas mazmorras, increíbles parajes y localizaciones, estilos gráficos, intensos combates, emociones…

Entre la perspectiva, el estilo gráfico y las 3D, en ocasiones nos dará la sensación de tener ante nuestros ojos un enorme juego de mesa de Zelda, en el que todo está animado y todo puede ser explorado.

La jugabilidad de la espada y el escudo al estilo tradicional de Super Nintendo traerá emociones hasta hoy enterradas para los jugadores de cierta edad. La espada también nos dará sorpresas, pero combinando este juego tradicional con todos los demás títulos tenemos una mezcla que funciona a las mil maravillas, lo tradicional y lo moderno se dan la mano.

¡Que no pare la música!, va en serio…

Desde la pantalla de título, ‘The Legend of Zelda: A Link Between worlds’ nos ha conquistado a través de los oídos. En la pantalla de título empezaremos a vibrar, Nintendo sabe la importancia de la música en esta saga (como en la mayoría) y de nuevo han puesto el listón alto.

Tenemos temas y efectos de sonido clásicos de la saga, el efecto al recoger un corazón de vida, los gritos de Link, el pitido que nos avisa que si no tenemos cuidado nos vamos al otro barrio…

Y por otro lado, remezclas y nuevas composiciones que siguen brillando a gran altura. Eiji Aonuma sabe la importancia de la música en la saga y por ello nos ha preparado sorpresas relacionadas con ella, aunque adelanto que nos costará rupias, deleitarnos el oído merecerá la pena.

Pintado en la pared

Pese a ser la continuación de un título mítico, ‘A Link Between Worlds’ tiene una personalidad absolutamente propia, pese a tomar elementos clásicos de la saga, ciertas novedades lo llevan a otro nivel, dejándonos un nuevo estilo de Zelda portátil.

Una de las novedades que más ha llamado la atención (porque se ha destacado en los tráilers y es una pieza clave de la aventura) es la habilidad de Link de convertirse en una pintura viva en la pared.

De este modo podremos tomar ventaja de la situación en muchos sentidos, podremos protegernos de ataques enemigos, superar pasos estrechos, alcanzar una plataforma elevada avanzando desde la altura en que nos fusionamos en la pared, despegar elementos de un muro… las posibilidades sorprenden desde el principio.

De hecho al ser algo tan nuevo, en ocasiones nos quedaremos pensando cómo avanzar, hasta caer en la cuenta de que esta nueva habilidad será una constante en la aventura, especialmente útil en las mazmorras y con algunos enemigos finales.