Repasamos los títulos de vaqueros que más han triunfado en el mundo de los videojuegos.
Fue una de las secuelas no oficiales de Cabal, un arcade de tipo “yo contra todos” en el que nos permitían manejar entre dos hermanos, un indio y un vaquero, a través de escenarios estáticos con la posibilidad de mover al personaje de un lado para otro mientras esquivamos y disparamos con el objetivo de eliminar a todos los enemigos que aparecían en la pantalla. Este tipo de juegos siempre se han tratado como los padres de la futura generación de los juegos en tercera persona, pues se trataba de mover al personaje de izquierda a derecha ya sea corriendo o con una voltereta lateral mientras movemos el puntero del arma disparando a todo lo que se moviese, incluía la posibilidad de derrumbar un local entero lo que hacia que su profundidad fuese mas adictiva en cada partida. Se podía jugar solo o en cooperativo.
Obligatoriamente este juego de recreativas debía de estar en el articulo. Sunset Riders trataba el salvaje oeste de una manera divertida y peculiar a través de un shoot em up para cuatro jugadores simultáneamente repleto de acción, escenas totalmente risibles (Cuando entrabamos en el Saloon y salía el personaje con bebida y agarrado de chicas) y muchísimas fases de plataforma como la de saltar por encima de una estampida de búfalos entre otras recordadas escenas. Fue una joya que obtuvo tras su salida en recreativas, una adaptación para Super Nintendo y otra para Megadrive, tiene momentos realmente buenos que en cierto modo parodiaban lo mejor de las películas del Oeste y además optaron los de Konami por una jugabilidad directa y vistosa. Este es uno de los pocos juegos que se merece una versión remasterizada en HD en las consolas de la nueva generación como Playstation 3 y Xbox 360 en sus respectivos bazares.
Hace unos meses me encontré en un centro comercial de Madrid una maquina arcade creada por la compañía Namco Bandai, se trataba de una mesa del tamaño de una de billar en el que mezclaba dos géneros bastante distantes, el futbol y el oeste. Cool Gunman es un juego hecho para dos jugadores, jugar solo es además de triste no tendría lógica, el objetivo es que cada jugador se coloque en cada lado de la mesa y olvidándonos por unos minutos de los Sticks, cogemos una pistola de luz que interactúa con el suelo de la mesa con la misión de meter una lata atada a una cuerda hasta la portería del equipo contrario, para ello, como hemos dicho antes, tenemos que disparar en el suelo donde se encuentra la lata, este suelo es interactivo con los disparos donde apuntemos, y al disparar, se levanta una solapa golpeando hacia arriba la lata llevándolo así hasta la portería del jugador contrario. Cuando la lata se introduce en la portería, el juego lo detecta como gol y te lo marca en una pantalla que se encuentra en mitad de los dos jugadores y la lata vuelve al campo para seguir el partido. Es muy divertido y sustituye perfectamente al ya rallante juego de mesa de hockey de golpear la pastilla gigante de un lado a otro. [youtube]YhZ-qR5Ye3M[/youtube]