Uncharted El Legado Perdido. Buscando relevo a la altura de Drake

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Chloe Frazer coge el testigo al frente de la saga, en una aventura originalmente ideada como DLC. ¿Qué novedades nos ofrecerá Uncharted El Legado Perdido?

26/07/2017 11:19
Cuando parecía que Naughty Dog le había dado carpetazo a la saga Uncharted cerrando el círculo de la trama de Nathan Drake, el estudio nos sorprende con un interesante experimento, introduciendo a una vieja conocida, Chloe, como nueva protagonista -acompañada de Nadine-. Quizás del éxito de Uncharted: El Legado Perdido en PS4 y de lo hondo que calen sus personajes dependa el futuro de la saga; lo hemos probado y lo que nos hemos encontrado es una prolongación de Uncharted 4, aunque con algunas novedades interesantes.
Uncharted: El Legado Perdido

Uncharted El Legado Perdido

Uncharted El Legado Perdido: Una aventura completa que comenzó como DLC

Nathan Drake nos ha dejado esta generación, eso es un hecho. El genuino héroe de acción que más alegrías le ha dado a la familia PlayStation en los últimos años cerró de forma más que digna su historia en Uncharted 4, sin intención de volver a embarcarse en más aventuras jugándose el cuello en más ruinas piratas; sin embargo Naughty Dog nunca dijo que fuera el final de la serie. Uncharted es una saga con unos pilares sólidos y una legión de fans detrás, pero sobre todo una licencia exclusiva que vende consolas PlayStation por sí misma, lo que no hay que desperdiciar. ¿Significa eso continuidad asegurada para tiempos venideros? Naughty Dog no es de esos estudios que deja que sus creaciones terminen muriendo de éxito.

En medio de este dilema aparece Uncharted: El Legado Perdido, el resultado final de lo que en un principio iba a ser un DLC de historia para Uncharted 4, como fue Left Behind para The Last of Us en su día. Sin embargo parece que lo ambicioso del proyecto llevó a sus creadores a darle alas al desarrollo y llevarlo tan lejos como fuera posible, dando como fruto una nueva entrega de duración habitual para la saga (se comenta que de unas 10 horas) que ha terminado convirtiéndose en un spin-off protagonizado por Chloe Frazer, una exploradora caza tesoros bien conocida por su aparición en anteriores entregas, que estará acompañada de Nadine Ross (Uncharted 4), haciendo las veces de IA acompañante, como Sam o Sully en otras ocasiones. El (gran) escenario donde tiene lugar Uncharted El Legado Perdido: los ghats del sur de la India, donde reinó una ostentosa civilización milenaria que, como no, dejó atrás varias reliquias tras su hundimiento que debemos recuperar.

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El nuevo emplazamiento elegido por Naughty Dog para este spin-off bebe directamente de la Madagascar de Uncharted 4, lleno de ruinas perfectamente recreadas o barrizales que lucen espectaculares mientras los cruzamos con el jeep, pero sin embargo tiene algo especial que lo hace único. Gran culpable de ello es la espléndida vegetación que lo inunda todo, una de las mejores que recordamos en un videojuego, aunque a parte de ello, sí, todo resulta muy familiar a lo visto en la última aventura de Drake. Hemos tenido acceso a una zona realmente extensa del mapa, en la que nos podemos mover en jeep junto con Chloe y Nadine de forma bastante libre, con muchas más tareas secundarias por hacer de lo que lo que pudimos ver en Uncharted 4 y sin un desarrollo tan lineal como nos tiene acostumbrados la saga. Sin embargo la narrativa sigue fluyendo como siempre, así que no esperéis un juego de mundo abierto al uso o volver a zonas antes inaccesibles para hacer backtracking. Uncharted El Legado Perdido nos deja tomar más elecciones de lo normal en la saga, pero sigue siendo un juego que se debe a la narrativa.

La narrativa sigue fluyendo como siempre, así que no esperéis un juego de mundo abierto al uso o volver a zonas antes inaccesibles.

Pese a que se experimenta con zonas más abiertas y explorables por el jugador y una ración mayor de puzles, el emboltorio jugable de Uncharted El Legado Perdido es tremendamente continuista respecto a Uncharted 4. De la cuarta entrega se mantienen todas las mecánicas, el uso del gancho, los más que frecuentes puntos de escalada, escenarios más verticales, un control calcado e incluso algunas señas de identidad, como el cable de remolque del jeep, que nos salvará de más de un problema. En este aspecto es donde más se nota que el proyecto de El Legado Perdido comenzó como una expansión para Uncharted 4 y no como una entrega más. Esta continuidad, el rescate de mecánicas y la constante sensación de "esto ya lo he vivido" es lo que más dudas nos ha generado en el conjunto, por eso creemos que será en el terreno de la narrativa, de los personajes y su química donde Uncharted El Legado Perdido se jugará convertirse en una entrega a la altura de la saga Uncharted o quedarse simplemente como un curioso experimento en PS4.

Uncharted: El Legado Perdido

Uncharted El Legado Perdido

Uncharted El Legado Perdido. Un experimento de futuro para la saga

Como ya os habréis dado cuenta, Uncharted El Legado Perdido se trata de un proyecto de transición entre Uncharted 4 y The Last of Us Parte II dentro de Naughty Dog y todo apunta que un globo sonda lanzado para testear muchas cosas: ¿están interesados los jugadores en un Uncharted sin Nathan Drake en la portada? ¿Tiene capacidad la serie de seguir enganchando contando nuevas historias? Al menos el estudio californiano quiere arriesgarse probando nuevas fórmulas con las que enriquecer la saga, -aunque el reciclaje de elementos de Uncharted 4 sea inevitable-. Uncharted: El Legado Perdido llega el próximo 23 de agosto, en unas semanas con el terreno bastante despejado de lanzamientos y que parecen bastante indicadas para que reciba atención necesaria de los jugadores. El reclamo también llega por el lado del bolsillo, uniéndose a otros lanzamientos exclusivos de PS4 del pasado que han llegado a precio reducido, lo que sin duda animará a muchos a darle una oportunidad.

Uncharted: El Legado Perdido llega el próximo 23 de agosto, en unas semanas con el terreno bastante despejado de lanzamientos.

A falta de probarlo más en profundidad, Uncharted: El Legado Perdido apunta a producto con grandes valores de producción pero notablemente continuista respecto a Uncharted 4, del que rescata un apartado jugable que nos sabemos al dedillo. Eso no es necesariamente malo, a menos que en el proceso no se aproveche para pulir algunos problemas que en la última aventura de Nathan Drake quedaron algo tapados, como la IA de los enemigos, sobre todo en los momentos de sigilo. Dejando de lado esto, lo que sí recibimos con más interés es el nuevo enfoque hacia niveles más abiertos y libres para explorar a nuestro aire, sin que ello choque con la narrativa. Uncharted siempre ha gravitado en torno al desarrollo de su guión, lo que normalmente se traducía en niveles lineales con poca exploración. Eso no es necesariamente malo, pero ya se ha demostrado por activa y por pasiva que también es posible ofrecernos juegos con mayor libertad en los que la trama siga siendo un pilar fundamental.