¡Analizamos la fulgurante trayectoria del clásico de la velocidad!
La primera entrega portátil de la serie llegó de la mano de Game Boy Advance, consola con la que F-Zero establecería una relación duradera aunque no excesivamente próspera.
F-Zero: Maximum Velocity está ambientado 25 años después de la época en que Captain Falcon y compañía alcanzaron la gloria en el campeonato y, en consecuencia, se encuentran ya retirados. En su lugar se introdujeron un total de diez nuevos pilotos y naves, uno de los cuales, Kent Akechi, asegura ser el hijo de Falcon.
Retro Fiummm!!
En términos de jugabilidad, Maximum Velocity resultó ser en cierto modo un paso atrás en la franquicia. Las novedades introducidas por F-Zero X se dejaron totalmente de lado y el título se basó enteramente en el juego original de Super Nintendo con apenas una mínima mejora gráfica, mientras que los modos de juego se limitaron al clásico Grand Prix y un nuevo modo multijugador a través del cable link.
F-Zero: Maximum Velocity recibió críticas generalmente positivas y logró unas ventas meritorias cercanas al millón de copias, pero aun así, debido en gran parte a su escasa ambición, entre los aficionados suele considerarse como el episodio menos afortunado de la saga.