PEGI. ¿Cómo se clasifican los videojuegos?

Reclamaciones al PEGI y polémicas desatadas

Como todo organismo que califica videojuegos por edades, el PEGI no ha podido evitar la polémica en cuanto al criterio de sus calificaciones o sobre la funcionalidad de sus etiquetas.

En primer lugar cabe recalcar que el PEGI no censura videojuegos, sino que los califica en base a sus contenidos con unas etiquetas u otras. Esto no quita que algunas veces los juegos lleguen recortados de forma voluntaria por parte de las compañías para cumplir con una edad más baja.

Es el caso de 'Beyond: Dos Almas', el cual fue modificado mínimamente en dos escenas de unos pocos segundos para entrar dentro del PEGI 16 y así acceder a un mayor público.

Entonces, ¿todos los videojuegos en Europa salen sin censurar? Tampoco. El gobierno de cada país puede aplicar censura en los videojuegos cuando lo considere oportuno y en casos como Alemania o Reino Unido algunos juegos no llegaron a lanzarse o tardaron más tiempo del esperado. Como se suele decir en estas cosas, cada maestrillo con su librillo.

En estos casos la organización del PEGI se encarga de describir qué contenidos son considerados como "más inadecuados" de cara a ayudar a las autoridades a decidir.

Un caso muy curioso de censura local también algo reciente es el de 'The Last of Us', juego que en su modo multijugador contiene diferencias entre las versiones europea y americana. La europea es la censurada, reproduciendo una menor violencia en sus escenas. Este caso es curioso pues la desarrolladora optó por un camino más rápido, pues la censura que posiblemente se aplicaría en uno o dos países la aplicó a todo el continente facilitando así las tareas de distribución.

El multijugador de The Last of Us fue retocado para adaptarse a todos los países europeos

Lo cierto es que la violencia de los videojuegos siempre ha estado envuelta en polémica, independientemente de los sistemas de calificación de edades.

Otra polémica que desatan las clasificaciones de edad, es el criterio con el que los organismos califican un videojuego en cuanto a sus contenidos inapropiados para menores. Posiblemente en esto haya que ser mucho más comprensibles de cara a los organismos que califican videojuegos, pues si todos nos pusiésemos a valorar qué etiquetas debieran ir en cada videojuego, no coincidiríamos muchas veces.

Un caso algo reciente; quizás menos polémico o menos debatido por ser una reducción de edad, es el de 'Call of Duty: Ghosts', juego que llegó con PEGI 16 en vez del PEGI 18 al que está habituado la saga Call of Duty. Aunque nadie se pronunció ante esta decisión parece que la violencia de este episodio es menos gráfica, lo cual impactaría de menor forma a un niño.

Pero no siempre la clasificación de edad contenta a todos, por lo que los editores pueden llegar a reclamar. Todas las reclamaciones van a parar a un Consejo de Reclamaciones independiente, el cual está formado por expertos en la materia. La decisión de este consejo sería ya inapelable en caso de seguir en desacuerdo con ella.

Según recoge el informe anual del sistema PEGI, desde el año 2009 tan solo hubo doce reclamaciones, de las cuales seis de ellas acabaron reduciendo la edad recomendada de los videojuegos. Juegos como 'Diablo III' pasaron de PEGI 18 a 16 o 'NHL 13' de PEGI 16 a 12. Otros se tuvieron que mantener con su calificación previa, como 'Metroid Other M' que quedó en PEGI 16 o 'Inazuma Eleven 2' que quedó en PEGI 12.

Resulta curioso ver que estas reclamaciones no solo son de acceso público sino que además sus resoluciones las podemos leer también desde la propia web de PEGI. Gracias a esto podemos saber que el contexto fantástico de 'Diablo III' ayuda a que este no tenga una calificación +18 o que una escena corta en la que se ve disparar con un rayo de hielo a un soldado es suficiente como para que 'Metroid Other M' esté calificado con PEGI 16.

¿Demasiado realismo para ser visto por un niño de 12 años?

¿Qué podría seguir aportando PEGI de cara a futuro?

Visto todo lo que detallamos en el presente reportaje, ahora queda preguntarnos qué más nos podría ofrecer el sistema PEGI de cara a un futuro. Lo que viene a ser la clasificación por edades parece del todo cerrada y muy completa, por lo que quizás tan solo se pueda mejorar la clasificación de contenidos.

Posiblemente lo que a más de uno se nos venga en mente a mejorar cuando compras un videojuego es el saber que este cumple con todo lo que habitualmente tenemos en un videojuego. Para identificar que por ejemplo, el juego está traducido, a veces tenemos que leer una letra muy diminuta, la cual no ayuda a identificar fácilmente si lo está o no lo está.

Otro problema que nos puede llegar a dar un videojuego es que después de comprado veamos que este necesita de una activación por internet, un mejor ordenador o incluso la necesidad de un periférico que nosotros no poseamos. Sobra decir que normalmente esto está detallado en la parte trasera de las carátulas, pero una estandarización quizás no viniese mal para identificar fácilmente si después de comprar el juego, este nos funcionará.

La información básica del contenido de los videojuegos europeos se llama PEGI

Otra información también útil sería el poder saber si el juego que compramos tiene o vaya a tener a posteriori contenidos descargables de pago.

Posiblemente de aquí en unos años los videojuegos se clasifiquen todavía con más detalles y el organismo PEGI siga evolucionando y actualizándose a los nuevos tiempos. Solo nos queda ver el paso del tiempo y pedir aquello que nos gustaría que se detallase de forma estandarizada para que al comprar un videojuego, siempre acertemos.