Los plátanos sirvieron para ocultar actos ilegales en Final Fantasy Legend II

Final Fantasy Legend II

A lo largo de los años, Final Fantasy nos ha sorprendido de muchas y variadas formas. Después de todo, nos ha presentado a personajes bien desarrollados, a malos que han llegado a ser de lo más queridos como es Sephiroth e incluso una jugabilidad que resulta inolvidable. Por supuesto, también nos ha presentado todo tipo de easter eggs que nos han despertado la curiosidad con el paso de los años, como es el hecho de que el número 7 en Final Fantasy VII tiene mucha más importancia de lo que parece.

Sin embargo, vamos a coger nuestra máquina del tiempo particular para regresar al año en el que Final Fantasy Legend II llegaba a Game Boy. Es el momento de sacar el polvo a este cartucho y retomar la acción para dirigir nuestros pasos hacia Edo. Si bien se trata de un lugar maravilloso, lo que nos llama la atención allí es que pronto nos vemos envueltos en un lío y es que debemos ayudar a los lugareños a localizar a un grupo de malhechores con la intención de intercambiar plátanos. Y sí, lo has leído bien.

Mensaje de Twitter

¿Por qué un intercambio de plátanos resulta un tema criminal?

Al hablar de un intercambio de plátanos con los malos ya nos puede venir una primera idea de porqué Square Enix lo hizo. Y posiblemente no te equivoques. Si bien en Europa y Estados Unidos pudo resultar extraño comprobar que nuestra misión era tan simple como intercambiar plátanos con los malos, esto en la versión japonesa no sucedía. Todo por motivo de evitar la censura.

Todos aquellos jugadores que vean una captura de esa misma escena en la edición japonesa se encontrarán que el verdadero intercambio se realiza con opio. Por supuesto, se trata de una droga prohibida y un tema que, de estar introducido en el juego, se traduciría automáticamente en censura y un aumento de rango de edad para que los jugadores pudiesen disfrutar de la obra.

Con intención de evitar este problema y poder llegar a un número mayor de jugadores, la compañía optó por cambiar las drogas por plátanos. Porque, después de todo, ¿qué tiene de malo un intercambio de plátanos? Todo esto si no piensas que eres un criminal dentro del juego, por supuesto. Así es que, tirando un poco de imaginación y sorprendiendo a los jugadores, la compañía encontró una forma curiosa de evitar la censura, ¿verdad? Pues puede que haya algo más.

Una fruta que antiguamente no estaba a la disposición de todos

El plátano en Japón es una fruta que cuenta con un gran cariño. De hecho, se trata de una fruta bastante popular a la hora de desear a alguien una pronta recuperación, algo que llamó la atención de muchos en el momento en el que Satoru Iwata se recuperaba de una cirugía y la gente le enviaba sus buenos deseos con plátanos. Curioso, sin duda, pero tiene sus razones.

En tiempos de guerra, allá por los tiempos feudales, el plátano era una fruta bastante cotizada y casi imposible de conseguir. Esto se debía a las fuertes restricciones de la importación, lo que hacía que pocos pudiesen saborear esta fruta, lo que podía provocar ciertos intercambios a escondidas. De ahí que muchos piensen que, de algún modo, la compañía pudo meter este guiño ya que, para los desarolladores japoneses, sí llegaba a tener un sentido. A pesar de que, fuera de allí pudiese llegar a sorprender y realmente, nunca se llegase a confirmar esta teoría.