FAST Racing Neo

Un juego prometedor y completo

El primer menú que nos encontramos permite seleccionar el tipo de juego: campeonato, disputado al mejor de cuatro carreras; multijugador, de hasta cuatro jugadores a pantalla dividida; online, en el que se esperan del orden de 8 a 10 jugadores; y modo héroe, similar al campeonato pero añadiendo elementos que incrementan la dificultad de las carreras.

La demo que se presentó en el Nintendo Treehouse, anterior a la que jugamos, excluía el modo héroe, pero incorporaba un modo contrarreloj y la posibilidad de hacer pruebas de pista. Es de esperar que todos los modos de juego se incluyan en la versión final. Seleccionamos disputar un campeonato y nos encontramos con tres niveles de dificultad o ligas que hacen referencia a las velocidades que alcanzarán las naves: subsónica, supersónica e hipersónica.

Pudimos seleccionar la nave que pilotaríamos entre diez opciones que difieren en velocidad máxima, aceleración y agilidad en el giro. Las diferencias entre unas y otras son sutiles, pero apreciables en el gameplay. Los responsables del juego nos confesaron que no esperan incluir más naves, puesto que desean dar prioridad al equilibrio entre ellas sobre la diversidad de opciones. Finalmente, se nos da la opción de elegir la colección de circuitos o serie en la que disputaremos el campeonato: cobalto, titanio, xenon y neon. Elegimos la serie cobalto, ya que era la única disponible en la demo; para probar el resto tendremos que esperar un poco más.

Controlar las naves es una delicia

El control lo podemos definir con una sola palabra: impecable. Las naves tienen una respuesta inmediata y predecible, tanto al joystick izquierdo - que controla el giro - como a los gatillos, que controlan desplazamientos laterales al estilo 'F-Zero'. Los botones A y B aceleran y frenan respectivamente, mientras que el botón R activa el boost, que puede ser recargado recogiendo esferas repartidas por el circuito. Tanto L como X permiten realizar una acción llamada cambio de fase, que sin duda os sonará a los que jugastéis al primero.

Este cambio de fase es una de las principales características de 'FAST Racing Neo'. Los circuitos muestran franjas de color azul y naranja que pueden aumentar o reducir nuestra velocidad, y su efecto depende de la fase de nuestra nave. De esta forma, debemos ir cambiando con los botones L o X la fase de nuestra nave para hacerla coincidir con el color que estemos atravesando. Al cabo de un tiempo jugándolo, nos dimos cuenta de que este sutil elemento de diseño interactivo cambia totalmente la forma de entender la mecánica de pilotaje y nos obliga a un esfuerzo mental extra. Cabe mencionar que en la demo hicimos uso de un mando clásico y en ningún momento fueron mencionados planes de aprovechar las funciones del controlador de Wii U.

Es fácil comparar este título con 'F-Zero' y 'Wipeout', pese a que ya tiene una primera entrega, pero percibimos también ciertas referencias a 'Mario Kart' en la posibilidad de acelerar antes de que el semáforo de salida se apagase. A pesar de nuestra insistencia, los responsables del juego se negaron a compartir con nosotros cuál es el momento adecuado para comenzar a acelerar, por lo que tuvimos la ocasión de ver tanto unos boosts espectaculares como vergonzantes derrapadas en la salida.

Otro aspecto destacable es el efecto de ciertos obstáculos sobre nuestra nave. El responsable del juego que nos estaba mostrando la demo nos sugirió en repetidas ocasiones que colisionásemos con cierto objeto que nos había hecho perder velocidad anteriormente. Cuando le preguntamos por el motivo de su insistencia, nos contó que el efecto negativo de esos obstáculos se convierte en velocidad adicional cuando son atravesados usando un boost. El fin de este comportamiento es que el jugador explore y descubra diferentes formas de obtener mejoras en su rendimiento en la pista.

Altas velocidades

La cámara está situada detrás de la nave que pilotamos y ofrece un excelente campo de visión que permite anticipar los obstáculos. El clásico problema de las cámaras en tercera persona de muchos juegos de conducción no es aplicable en este caso, puesto que la naturaleza arcade de este título elimina el sobreviraje y la necesidad de corregir los giros. Sin embargo, según los propios diseñadores del juego, eso no impide que algunas naves describan un sutil deslizamiento lateral cuando su física les impida realizar giros bruscos. En definitiva, la vista que nos ofrece el juego contribuye a la sensación de velocidad que promete el juego, sin suponer un inconveniente en ningún momento.

Los circuitos se ven cuidados y cargados de detalles. Por ejemplo, en uno de los circuitos que pilotamos en la demo, situado en un paraje desértico, pasamos a toda velocidad por una zona donde lombrices gigantes entraban y salían de los terrenos próximos a la pista. El mismo circuito tenía secciones en las que algunos pequeños cactus crecían en la arena que había traspasado los límites de la pista, frenando nuestro avance si intentábamos pasar sobre ellos. También pudimos ver climatología que, si bien no parecía afectar al pilotaje, resultaba muy vistosa desde el punto de vista gráfico.

En lo que respecta a la pista, lo primero que llama la atención es que describe formas totalmente tridimensionales. No solo tenemos que enfrentarnos a cambios de rasante y peraltes imposibles, sino que también una misma sección de la pista puede ser irregular. Los circuitos además pueden presentar bifurcaciones, saltos u obstáculos de distinto tipo. Una muestra de su cuidado diseño es que en la liga y serie que jugamos - presumiblemente las más sencillas en la versión final - resultaba relativamente sencillo completar las carreras colisionando en pocas ocasiones con los muros laterales. Sin embargo, recoger las esferas, aprovechar los tramos de pista que permiten aumentar nuestra velocidad y, en definitiva, hacer todas esas cosas que nos ayudarían a quedar en las primeras posiciones, nos resultó muy complicado.

Técnicamente admirable en Wii U

En cuanto al apartado técnico, los creadores afirmaron que su objetivo es ofrecer una experiencia consistente a 60fps. No obstante, no confirmaron si esos estándares se mantendrán en partidas multijugador a pantalla dividida. Por lo demás, el juego luce extraordinario. Hay que reconocer que tiene pequeñas imperfecciones, pero también que cuando vamos a toda velocidad es prácticamente imposible observarlas. Preguntado por este tipo de cuestiones, el diseñador encargado de estos aspectos comentó que su prioridad ha sido ofrecer una experiencia en la que primase la velocidad.

En cualquier caso, cabe recordar que aunque no lo parezca estamos hablando de un juego desarrollado por un estudio independiente compuesto por sólo 5 personas. Estamos ante el título llamado a cubrir la escasez de juegos sobre carreras futuristas en el catálogo de Wii U. Hereda algunos elementos de 'F-Zero', otros de 'Wipeout', pero no es ni uno ni otro. Como le ocurría a su primera entrega, 'FAST Racing Neo' promete tener su propia personalidad.