La Saga Forza Motorsport

Sony supo ver la jugada y fue en el año 97 en Japón, y 98 en el resto del mundo, cuando lanzó al mercado Gran Turismo para Playstation. Su éxito no se hizo esperar y tanto el original como las secuelas se convirtieron en superventas cosechando unas buenísimas críticas en la prensa especializada. Tuvieron que pasar siete años hasta∫ que Microsoft dió la réplica lanzando Forza Motorsport en Xbox.

Un poco de historia

Nos situamos en mayo de 2005. La Xbox ya llevaba tres años en el mercado y si bien tenía varios juegos sobresalientes como Halo, Ninja Gaiden o Project Gotham Racing 1 y 2,  los jugadores demandaban un juego de conducción enfocado a la simulación como su contemporaneo Gran Turismo 4. La respuesta de Microsoft fue Forza Motorsport.

Forza Motorsport, a pesar de ser novel, fue una revolución en los simuladores de conducción. No se sabe si fue gracias a una demo previa que resultó ser un fiasco, pero los desarrolladores lanzaron un producto casi perfecto, de sobresaliente.

Forza Motorsport según lo arracanbas fue un juego que entraba por los ojos. Una intro de quitarse el sombrero, unos menús claros tanto para apartados generales como para los que se refieren a la mecánica del vehículo, y sobre todo un espectacular engine gráfico que mostraba todas las virtudes de la tarjeta gráfica de la consola de Microsoft. Tanto los vehículos como los escenarios estaban en otro nivel. Los vehículos destacaban por un más que buen modelado y por la posibilidad de sufrir desperfectos, algo que siempre se echó de menos en la serie Gran Turismo. Los escenarios espectaculares y variados, donde lo mismo podíamos conducir a toda velocidad por New York o por una carretera de montaña. Sin embargo, Forza Motorsport presentaba algunas carencias como los 30 FPS a los que corría el juego o la a veces sensación de artificialidad del empleo de la luz en los circuitos.

Jugablemente, estábamos ante todo un dechado de virtudes. Modos clásicos como arcade, contrarreloj o carrera libre y un modo que realmente era la esencia de Forza Motorsport, el modo carrera. El modo carrera consistía en competir en las carreras que queramos y para las que reunamos ciertos requisitos, como por ejemplo tener un coche adecuado, el cual podía ser modificado tanto mecánica como estéticamente. La curva de aprendizaje se podía adecuar a cada tipo de jugador puesto que el jugador podía activar las ayudas necesarias con tal de llegar a la meta. Otra opción era empezar yendo a por todas, aunque no tardaríamos en salirnos de la pista e ir a dar contra el guardarraíl. Los adversarios rayaban a un gran nivel, pareciendo incluso a veces personas por las pifias que hacían con tal de adelantar una posición.

Tampoco podemos olvidarnos de la opción de crear nuestro piloto virtual, al que tras una serie de pruebas, educábamos de mejor o peor manera delante del volante. Sería nuestra responsabilidad hacer que ese "Fitippaldi" se convirtiera en el mayor as del volante.

Por si todo esto fuera poco, los modos en Xbox Live alargaban de una manera infinita el juego. Lastima que entonces no era tan habitual disponer de una cuenta para el Live como ahora.

La salida de Forza Motorsport 2 para Xbox 360 no hizo más que aprovechar el hardware de la blanquita para mejorar las lagunas que arrastraba la primera parte. Para empezar, se aumentó en número de vehículos de unos doscientos a más de trescientos. Más coches, más polígonos, mejores físicas, mejor IA, más configurable, un engine corriendo a 60FPS, Xbox Live a tope, eso era Forza Motorsport 2. A pesar de todas las mejoras , Forza Motorsport 2 también presentaba algunos puntos débiles.

De nuevo, la iluminación no era todo lo buena posible. Desde algunos ángulos se veía como muy artificial. Predominaban los circuitos vacíos de detalles sobre algunos como los de New York que eran un placer a la vista. Y también se perdió el modo de crear a nuestro piloto virtual.

Pero la mayor novedad de Forza Motorsport 2 fue la opción de diseñar nuestros propios acabados visuales. Un brutal editor en el que con la suficiente práctica y paciencia se podía acabar diseñando verdaderas obras de arte.

Forza Motorsport 2 se convirtió en todo lo que los amantes de las cuatro ruedas podían querer en un videojuego y, hasta ahora, muchos estarán de acuerdo conmigo en que hoy por hoy es el rey de los juegos de conducción en videoconsolas. ¿Lo habrá superado esta tercera parte?

Las novedades de Forza Motorsport 3

Mañana llega a las estanterías de todas las tiendas la nueva entrega de la serie, Forza Motorsport 3, del que más adelante publicaremos un análisis exahustivo. En este reportaje nos centraremos en las novedades respecto a la segunda parte.

Para empezar, diremos que el juego sigue la linea continuista que lleva la saga. Al igual que pasó al aparecer en el mercado la segunda parte, el número de vehículos se ha visto incrementado en esta tercera hasta los 400 coches de 50 marcas diferentes. El número total de trazados también se ha visto incrementado hasta llegar a los 100.

Gráficamente, esta tercera parte de Forza Motorsport ha ido puliendo detalles respecto a la segunda parte. Ahora los coches y circuitos se ven más detallados, pero lo que realmente está bien conseguido es el interior de cada uno. Se ve como cada modelo ha sido estudiado en detalle y reproducido fielmente. La sensación de conducir desde la vista interior es algo impagable. Como novedad cabe destacar una característica heredada de GRID y es el poder parar la carrera en cualquier momento y volver atrás en el tiempo para volver a tomar esa curva que ha echado por tierra todo el trabajo acumulado durante la carrera.

Los menús han vuelto a pulirse de forma que siguen siendo claros e incluso a la hora de crear esos vinilos imposibles de miles de capas. La IA sigue la linea continuista, muy buena, con siempre dos o tres corredores dando mucha guerra durante la carrera y que nos harán emplearnos a fondo. Los más noveles que no desesperen, que volvemos a tener la posibilidad de contar con todo tipo de ayudas e incluso podremos hacer que un piloto corra por nosotros. Obviamente, las ganas serán a repartir, por lo que nuestro papel queda relegado a una posición más dominante pero menos divertida dentro del juego.

En definitiva, si Forza Motorsport 2 es el actual rey de la conducción en Xbox 360, este nuevo Forza Motorsport 3 tiene muchas papeletas para tomarle el relevo.