Impresiones DiRT Rally 2.0

DiRT Rally 2.0: Vuelven las carreras más exigentes

DiRT Rally, a pesar de que como licencia lleva entre nosotros poco menos de cinco años, sus raíces originales datan de mucho antes, concretamente desde hace más de 20. Seguro que los más veteranos aún os acordáis de la legendaria serie Colin McRae Rally, que tantos buenos momentos nos ofreció desde la quinta generación de consolas hasta la actual, cambiando de nombre hasta llegar a la que conocemos hoy conocemos simplemente como DiRT Rally. La última entrega de esta serie debutó en los sistemas PC, PS4 y Xbox One allá por el año 2015, ofreciendo a los jugadores de estas plataformas una experiencia de Rallies que fue muy bien valorada por crítica y público en cuanto a jugabilidad se refiere, aunque algo falta de contenido.

DiRT Rally, al ser un reinicio de todo lo visto hasta la fecha, tuvo en su contenido base una serie de problemas, como por ejemplo un número de vehículos y pistas bastante limitado para los tiempos que corren. En DiRT Rally 2.0, los chicos del estudio inglés Codemasters han querido ir un paso más allá y aumentar la oferta mediante la inclusión de nuevos vehículos y pistas procedentes de varias partes del mundo –todas ellas basadas en lugares reales y perfectamente reconocibles- en las que poner a pruebas nuestras habilidades al volante. Y es que DiRT Rally 2.0, siguiendo la estela de su sucesor, requerirá a los jugadores cierta experiencia en el manejo de los vehículos que hay disponibles ya que el factor simulación es muy elevado.

DiRT Rally 2.0

DiRT Rally 2.0 propone una jugabilidad donde los errores se castigan mucho, lo cual nos obliga a estar no solo atentos al trazado que se extiende ante nuestros ojos, sino también a las instrucciones que nos dictará nuestro copiloto en todo momento; la versión que probamos estaba en inglés, pero el juego llegará en completo castellano. A pesar de lo complicado que pueda parecer al principio, sobre todo a los más novatos, bastará con unas pocas carreras (tortazos incluidos y salidas de pista frecuentes) para cogerle el tranquillo a la jugabilidad que presenta el título de Codemasters. A nivel personal, comentar que la última entrega de la serie que jugué fue uno de PS One, pero no me costó mucho cogerle el tranquillo a la nueva.

Exigencia máxima al volante

Durante la larga sesión a la que asistimos tuvimos la oportunidad de disfrutar de dos de los modos de juego incluidos en DiRT Rally 2.0, ambos con la licencia oficial de la FIA World Rallycross. En la primera modalidad nos pusimos a los mandos de un vehículo de Rally y cogimos carretera y manta para enfrentarnos a un circuito que, si bien en sus primeros compases no presentaba dificultad alguna, a partir de la mitad se iba complicando un poco debido a la aparición de curvas, caminos estrechos y un terreno muy irregular. Todo esto junto hace que la experiencia en la conducción sea muy exigente en todo momento, pues una pasada de frenada, un giro brusco o un patinazo en el instante menos adecuado hará que nuestra carrera se convierta en un desastre.

Durante la prueba del Modo Rally, no fueron pocas las veces que nos dimos algún que otro paseo por el monte, nos estampamos contra un árbol por culpa de ir a mucha velocidad o pegamos un patinazo en curvas cerradas. La atención al entorno que exige DiRT Rally 2.0, como bien sabrán los amantes de la licencia, debe ser muy elevada y no dejar nada al azar pues, como ya hemos comentado, el coche podría acabar cayendo por un terraplén y adiós a nuestra carrera; tan pronto podemos ir primeros con una gran ventaja sobre nuestros rivales como últimos por culpa de una salida. El título de Codemasters lleva la simulación ante límites insospechados, haciendo que la experiencia resulte de lo más agradable.

DiRT Rally 2.0

El segundo modo que pudimos probar fue Rallycross, que sigue los mismos parámetros que el anterior ya que también nos exige mucha atención al volante y la pista. Eso sí, en esta ocasión hay que aderezar la experiencia con rivales. Mientras que en el Modo Rally vamos solos por una posta  y nuestro único rival es el tiempo, en esta variante tendremos que vernos las caras con otros pilotos, cuyo comportamiento dista mucho de ser noble. El contacto es una máxima en este modo y puede: bien jugarnos una mala pasada o hacer que nuestro rival se empotre contra el muro. Este tipo de carreras pondrá a prueba nuestros reflejos, resistencia y, de paso, nuestra nobleza –o falta de ella- al volante.

Tanto en uno como en otro modo, la experiencia de juego fue altamente satisfactoria y exigente, pues controlar los coches no será nada sencillo en DiRT Rally 2.0 debido a su naturaleza de simulador; cada vehículo responderá diferente. Todo influirá en la conducción, por lo que deberemos ajustar bien los parámetros del vehículo según el tipo de trazado y prepararlo a conciencia contra las inclemencias que se presenten. Para ello, el título de Codemasters contará con numerosas opciones de personalización, permitiéndonos mejorar algunas de las partes clave de nuestro vehículo. Un vehículo que, por cierto, será susceptible de avería por la colisiones y con la consiguiente pérdida de rendimiento en carrera.

DiRT Rally 2.0

Más trazados y vehículos a nuestra disposición

Uno de los aspectos más criticados de la entrega anterior fue, como ya hemos comentado unas líneas atrás, el escaso número de pistas y vehículos disponibles. En DiRT Rally 2.0, el equipo inglés ha querido solventar esta vicisitud incluyendo nuevos trazados y vehículos para que los jugadores tengan más capacidad de elección. Así pues, según datos proporcionados por los chicos de Codemasters, esta entrega contará con un total de seis localizaciones diferentes -cada una con sus propios trazados basados en entornos reales- y que nos llevarán hasta lugares del mundo tan reconocibles como Nueva Zelanda, Argentina, España, Polonia, Australia y Estados Unidos. En ellos, pilotaremos en toda clase de pistas (arena, asfalto, mojado) que pondrán a prueba nuestra pericia al volante.

Para domar todos y cada uno de los trazados que veremos en DiRT Rally 2.0, los jugadores tendrán a su disposición más de 40 vehículos perfectamente preparados para toda clase de condiciones. Entre los vehículos disponibles encontraremos no solo los más actuales del campeonato de Rallycross, sino también algunas leyendas del pasado. La lista al completo de vehículos disponible aún no podemos ofrecérosla, pero sí deciros que entre ellos veremos algunos modelos tan reconocibles como el VW Polo GTI R5, el Ford Mustang RGT, el Citroen C3 R5 o el Mitsubishi Lancer Evolution X, por poner un ejemplo.  Por si esto no fuera suficiente, tanto la lista de trazados como la de coches se verá ampliada en un futuro con nuevas incorporaciones mediante DLC.

DiRT Rally 2.0

Por último, comentar que en los parámetros gráficos encontraremos un título muy correcto, con vehículos muy bien diseñados y con un alto nivel de detalle. En lo que respecta a los escenarios, al estar basados en lugares reales, veremos un trabajo muy loable por parte del estudio inglés, quien ha vuelto a hacer uso del motor EGO Engine para el desarrollo de esta entrega. La conocida herramienta gráfica, creada por la propia Codemasters, ya nos ha mostrado en el pasado todo lo que es capaz de hacer. Al ser una demo, no podemos incidir en este apartado, aunque lo que hemos visto, que estaba ejecutándose en una PlayStation 4 Pro, no desmerece en absoluto. Si estáis interesados en esta entrega, os recordamos que llegará a PC, PS4 y Xbox One el próximo 26 de febrero en dos ediciones diferentes.